El Campillo, próximo a Encinasola, era la finca en la que cazarían en la mañana del 16 de noviembre el Club de Monteros de Encinasola. Concretamente, la mancha de La Moña, la cual cuenta con una extensión aproximada de 580 hectáreas, de dehesa con grandes barrancos, jarales y una alameda de eucalipto y pinos. Estas características hacen de ella un buen lugar para que jabalíes y venados campen a sus anchas. Como siempre, el Hotel de Encinasola ofrecía el desayuno a los monteros que, ilusionados, acudían una vez más a esta cita montera. Cuarenta y tres puestos fueron montados esta vez por Paco Berjano y Hugo Larrubia para cerrar esta mancha.
Con la experiencia de la jornada anterior, el tiempo apremiaba; así, a las diez menos cuarto salía la primera armada para cerrar la zona a batir y a las once treinta estaban entrando los furgones de los perros en la finca.
La nota negativa la daba Manuel Piano por la emisora que informaba de que una gran pelota de reses abandonaba la zona a montear justo por donde tenían que entrar las rehalas. No empezaba bien la jornada. Pero, bueno, tras la suelta, los lances se fueron repartiendo, al igual que la caza, homogéneamente por el mapa de la montería, ofreciendo lances aquí y allá con altibajos a lo largo del tiempo. Mucha hembra entre las reses y mucha ladra que despistaba a los perros y daba cierta ventaja a los cochinos, que entraban zorreados a las posturas.
Así, en el dos del cierre de los Eucaliptos, Jose Luis Tomé, que había adquirido la postura a través de la Rehala Monsalud, de José Manuel, abatía una cochina enorme que entraba sola. Posteriormente, se hizo con un venado en emocionante lance a los perros de Manuel Caballero y, por último, una locomotora atravesaba su postura y consiguió frenarla de certero disparo, resultando ser una cochina enorme, disfrutando así de una magnífica jornada. También Lechuga JR, conseguía hacerse con un venado y una cierva con el 8×68 y consentimiento de su mentor, algo impresionante. Antonio y Borja Mariscal también fueron de los que mojaron con un venado cada uno, además de otro apresado y rematado contra las mallas del Bravo por las Rehalas JV Pestorejo.
Aunque el que más se divirtió fue el amigo Becerra, quien con sus canes levantó según el más de veinte guarros, y que los monteros, malos ellos, según decía, habían malogrado. El amigo Francisco Javier, comúnmente conocido por Sisco, fue el afortunado que en esta ocasión abatió el venado de la montería, en el uno de la armada que montaba Paco Berjano.
Finalmente, el plantel mostró un total de 15 venados, 13 jabalíes y 16 ciervas. Tras el tercer tiempo, se procedió a capturar y juzgar a Ismael Verde Estévez por haber abatido su primera res, y condenado tras declararse inocente a ser aliñado con un par de huevos por la hazaña, un sobre de azúcar por su dulzura al respetar el animal y portar su corazón durante la consumición de un fresquito para los asistentes.
Una crónica de Carlos Casilda.
FICHA
Organización: Monteros de Encinasola
Finca: Campillo
Mancha: La Moña
Localidad: Encinasola (Huelva)
Fecha: 16/11/2014
Puestos: 43
Rehalas: 19
Cupo: sin cupo
Tipo finca: abierta
Nº ha monteadas: 580
Venados: 15
Jabalíes: 13
