El Dallas Safari Club (DSC) de Texas, Estados Unidos, ha informado que cancelará la caza del rinoceronte negro subastado el pasado mes de enero, si el Servicio de Pesca y Vida Silvestre (FWS) de Estados Unidos niega al cazador la autorización para importar el trofeo desde Namibia.
El permiso de caza de este ejemplar de rinoceronte negro para ser abatido en Namibia se subastó en la convención anual del DSC en un acto benéfico a favor del Game Products Trust Fund de este país.
Como ya informamos en su día en CazaWonke, el Gobierno namibio aprobó esta autorización de conformidad con las disposiciones de CITES para generar fondos para iniciativas de conservación del rinoceronte y el ejemplar a abatir sería un animal viejo, fuera ya de su periodo reproductivo, y que, por su naturaleza territorial, pueda impedir que congéneres más jóvenes y de menos tamaño se reproduzcan.
«Namibia quiso realizar la subasta aquí con la esperanza de lograr más dinero para la conservación que con los permisos previos que han vendido en este país africano y, además, porque el trofeo se podía importar a EEUU sin problemas», afirman desde el DCS.
El cazador que se alzó con la subasta fue Corey Knowlton, que ofreció pagar 350.000 dólares por el permiso de caza y que recibió numerosas amenazas por ello.
La pasada primavera Knowlton solicitó un permiso del Servicio de Pesca y Vida Silvestre (FWS) de Estados Unidos para importar el trofeo tras la finalización de su lance, cacería que sería organizada y supervisada por las autoridades namibias.
Pero, por el momento, el FWS ha informado que está evaluando si esta caza permite alcanzar el objetivo de «permitir la supervivencia de las especies», ya que, según la Ley de Especies en Peligro de Extinción, el FWS puede examinar «las circunstancias individuales de cada solicitud de importación».
Tras recibir más de 25.000 comentarios públicos que se oponen al permiso el FWS indicó que todos los comentarios serán «examinados» para determinar si la importación «mejorará o será perjudicial» para la supervivencia de la especie, no fijando el tiempo que tardará en tomar una decisión al respecto.
Si el permiso de importación finalmente no se concede, el DSC devolverá el dinero a Knowlton.
