La Comisión Europea está pensando en la aplicación de «posibles de medidas de transición» para evitar tener que pagar compensaciones por la prohibición de las armas de categoría europea B7, si se aprueba la propuesta de modificación de la Directiva de Armas CEE 91/744, propuesta que incluye la prohibición de las armas semiautomáticas (lo que incluiría también a rifles y escopetas de caza y tiro con esta característica).
Así lo afirmaba ayer Alain Alexis, representante de la Comisión Europea, al final de la audiencia del Comité IMCO, tras preguntar Vicky Ford, del European Conservatives and Reformists Group, sobre el número concreto de armas de categoría B7 autorizadas, cuántas habría que prohibir y las compensaciones que habría que entregar.
Alexis contestó que el número concreto de armas no se conoce, «por la mala definición de la directiva en cuanto al ámbito de aplicación de las B7″, afirmando que se tendría que precisar «qué se entiende por armas a prohibir, para luego poder identificarlas».
En cuanto a la compensación, aseguró que mientras no se sepa de cuántas armas se está hablando no se podrá calcular el importe de las compensaciones, añadiendo que «antes de hablar de compensaciones» hay que ver «la aplicación de posibles de medidas de transición», que permitirían «evitar este problema» de las compensaciones.
ANARMA, la Asociación Nacional del Arma de España, ha mostrado su malestar ante estas declaraciones de Alain Alexis, realizadas «sin vergüenza ni pudor alguno», en las que queda patente la intención de la Comisión Europea de servirse de disposiciones legales transitorias «en confabulación con los estados miembros», para «despojar» a los legítimos usuarios de armas de sus propiedades «con total impunidad». Es decir, esta pandilla «de sinvergüenzas, caraduras, manipuladores, mentirosos y chorizos con corbata, a los que pagamos sueldos exagerados, nos robarían como lo puede hacer cualquier otro criminal, pero ellos dotarían a su acción de cobertura legal», afirma esta asociación.
