Armas y munición

En el punto de mira: conformación del equipo para la próxima temporada. Por Michel Coya

Muchos son los equipos que pasan todas las temporadas por mis manos, tanto probando como cazando. La realidad es que poco tiempo me queda al final para tirar con lo de casa, haciendo ya unos diez años del último conjunto que conformé para mí. En aquella ocasión, para hacerlo, definí objetivos, luego. Simplemente. fui adecuando el presupuesto hasta que las características de lo montado cubrieran exactamente mis necesidades.

En esta ocasión me he puesto de nuevo manos a la obra intentado actualizar lo que tan buenos resultados me ha dado. Al final, ese primer paso, a modo de objetivos, debe ir cargado de sentido común, apartando corazón de cabeza, de otro modo acabaremos con aquello que no cubrirá nuestras expectativas… Bueno, bueno, un instante, ante todo debe gustarnos, nunca compre un rifle o un visor que no le guste, hay suficiente oferta para poder encajar precio y estética.

Hecho el apunte, pasemos a los objetivos. En mi caso cazo un poco de todo, desde batidas y monterías a esperas y recechos… sobre todas las especies españolas. Es evidente, entonces, que necesito un todoterreno, con una salvedad: el cazadero en el que más lo utilizaré será en la alta montaña, tanto para recechar como para cazar batidas de jabalí. Esta última modalidad debe tener un mayor ‘peso específico’ en la decisión final, no sólo por el mayor número de salidas, sino por ser, sin duda, la más exigente que un cazador pueda practicar en nuestro país.

El motivo es sencillo, una mezcla de terreno y prisas que lleva al cazador, en muchas ocasiones, a un notable agotamiento. La subida a los puestos, en general a contrarreloj, el cambio de montes para nuevas echadas o el arrastrado de la caza hasta los vehículos, requiere un buen estado físico si queremos estar a la altura de las circunstancias. La valoración del peso total del equipo se muestra, entonces, como una machacona obsesión. Basta con poner un rifle en las manos de un practicante habitual de la modalidad para escuchar siempre en primer lugar algo relativo a esta característica: «¡Coño, qué poco pesa!» o, al contrario, «¡Esto pesa que te entierra!». Y es que, cuando uno anda justo de fuerzas, cada gramo parece multiplicarse, convirtiéndose en un lastre que se cuelga de nosotros, pudiendo convertir la esperada jornada en toda una tortura que tardaremos en olvidar. Durante muchos años cacé con un equipo de esos en cuya confección mandó más el corazón que la cabeza. Buscaba rasante y potencia óptica a consta de lo que hiciese falta, priorizando sobre aspectos que jamás debiera haber olvidado. Pagué por el error sobre el terreno, jornada tras jornada, jurándome entonces que nunca más olvidaría poner en la amasadora prioridades y gustos, la lección más eficaz para la conformación de nuevos equipos.

Esta vez voy más lejos, añadiendo una serie de complementos que van desde los cascos protectores, al chaleco y cuchillo. Consigo con ello, finalmente, un conjunto a la altura de cualquier modalidad y pieza que pretenda cazar, con una especial atención a nuestra salud auditiva y a la seguridad durante las cacerías. No lo olvide nunca, amigo, especialmente ahora que comienza una nueva temporada, que en la caza, siempre, precaución; es nuestra obligación luchar para que no se produzca un solo accidente más.

El rifle

Tras haber cazado durante más de diez años con la customización de un R93 Luxus España, la decisión por el Blaser R8 fue sencilla. En aquel entonces fueron tamaño, peso y capacidad de combinación las características que me llevaron a decidirme por él… y ahora lo vuelven a ser. Convencido de que la recámara será en .300 Weatherby Magnum, conseguir un rifle que monte un cañón de 65 cm y continúe con dimensiones de estándar, no es tarea sencilla. El peso es, en cambio, bastante diferente del modelo anterior, más si lo comparamos con la personalización que finalmente conseguí. Fue mi amigo, el tristemente desaparecido Antonio Sarmiento, de Narciandi, Cangas de Onís, quien toco las maderas hasta conseguir que el peso bajase a poco más de 3,1 kilos. Esta vez lo encomiendo a mi amigo Lalo, el Zapatero, un culatero capaz de hacer las modificaciones pedidas con total precisión y profesionalidad.

La idea es conseguir dos mejoras a la vez: por un lado, una adaptación perfecta a mi físico, que transforme medidas de rifle estándar en la sensación de ajustarse ‘un guante’; por otro, esa rebaja en la báscula de la que acabamos de hablar.

Tomando como base un R8 Luxus, se toca la carrillera eliminando los dos nervios embellecedores, simplificándola, reperfilando el canto hasta llevarlo a pico hasta el cuerpo de la culata. El lomo original del R8 es recto, buscando un mejor encare con visor, a la vez que ayuda a dirigir lineal el retroceso al hombro. Para no perder esas virtudes, rebajo sólo a modo de un mínimo montecarlo, coincidiendo con la terminación de la carrilera, cortando a continuación la culata a mi longitud, colocándole de nuevo la cantonera original de goma. Con unas manos pequeñas siempre es un problema el correcto asimiento de empuñaduras estándar. Se rebaja por la parte anterior hasta que la distancia del dedo es óptima, continuando con un reperfilado total de la garganta manteniendo un ligero moño.

El guardamos se toca por abajo en toda su longitud, por los laterales sólo desde la mitad hacia delante. El motivo son los nervios del cerrojo, que discurren por debajo, justo hasta ahí, dejando una pared de madera muy estrecha. El puntal de ébano es retocado convirtiéndolo en un schnabel más agresivo. A continuación, se realiza el picado y se trata la superficie al aceite. Posteriormente, y ya en casa, le doy a muñequilla tres capas de aceite Tru-Oil de Casey, buscando una protección extra y elevando el nivel de brillo de la superficie para resaltar la veta. Completo la customización cambiando la bola original de plástico de la maneta por una algo mayor, hecha de madera de encina, que me regala el extremeño Antonio Barrio, y está realizada a partir de la madera de una vieja viga centenaria… Ve, esas son las historias, esa es la diferencia, ese uno de los motivos por los que me gusta la madera.

Seguro que alguno de ustedes se habrá preguntado desde el principio el porqué de no haber optado por un ultraligero. Pues sí, podría haberlo hecho: fibras de carbono, cañones delgados… pero, de nuevo, lo que apuntaba al comienzo, el gusto personal que es en mi caso el sentimiento de algo realmente mío, alejado de la herramienta, un sentimiento romántico que para no empujarme al error debe cumplir escrupulosamente, como en este caso, con los objetivos marcados.

Y llega el momento de la verdad, báscula y metro, 108 cm con un tubo de 65 cm y poco más de 3,2 kilos, no está nada mal, reto conseguido, un potentísimo magnum en las dimensiones de un estándar ligero.

El visor

Aun no siendo el visor definitivo que montaré en mi nuevo equipo, aprovecho este que envían para probar y que, sin duda, cumple
exactamente con las premisas buscadas. El nuevo Zeiss Conquest V6, perteneciente a la nueva familia del alemán, ocupa la gama media-alta Conquest, utilizando ahora multiplicación x6. En concreto, el modelo recibido es el 2,5-15×56 con torreta balística ASV, sin duda, un todoterreno con alta capacidad. Entre sus características, lentes del objetivo con fluorita FL y Lotutec. La transmisión lumínica llega hasta el 92% que, unida a un objetivo de 56 mm, permite un uso óptimo en atardeceres, amaneceres, esperas y recechos. A 2,5X no debemos tener problemas para cubrir puestos cortos, al máximo 15X, las piezas más largas quedan al alcance. A ello ayuda la ASV, una torreta balística capaz de darnos corrección en la caída y que deberemos optimizar para nuestra carga utilizando el calculador balístico de Zeiss. Me sorprende, no obstante, que se haya prescindido en este modelo de una torreta correctora del paralaje, teniendo en cuenta que con más de 12X siempre es recomendable, debido a los errores que se producen si no colocamos el ojo exactamente en el eje óptico. Piense que la ASV V6 nos da correcciones de caída y compensación hasta 1000 metros, quedando en evidencia que, ante la posibilidad de disparos tan extremos, la corrección de este error es obligada.

La retícula es una 60 situada en segundo plano, con punto central iluminado. El peso con carril es de 725 gramos; su longitud, 35,2 cm. Con tubo de 30 mm y carril Zeiss, sobre monturas originales Blaser queda muy bajo, facilitando el encare con comodidad.

Aimpoint Micro H2

Decidido a sumar un equipo que me permita las máximas prestaciones en cualquier situación de caza, echo mano de la firma Aimpoint y su punto rojo micro H2, para completar los elementos ópticos.

La opción que nos brinda poder elegirlo con monturas originales Blaser, nos permite combinarlo con el visor en función del puesto que nos corresponda. Un tamaño tan pequeño, con una longitud de 7 cm y un peso de sólo 136 gramos con monturas incluidas, invita a llevarlo siempre desmontado en la mochila, pudiendo montarlo en pocos segundos si el puesto ocupado es muy corto o de monte muy cerrado.

Está claro que los visores de punto rojo nos ofrecen el top en capacidad de captación de puntería para tirar con bala. La fusión de lo intuitivo del nodo, el enorme campo visual y su falta de aumentos, se suman para darnos un sistema con un altísimo rendimiento sobre caza a la carrera en batidas y monterías. En el caso de este H2 el diámetro del nodo de 2 MOA. Colocado sobre el R8 queda extremadamente bajo, facilitando el tiro cuando lo cerrado requiera sobre todo agilidad, con la innegable ventaja de no suponer ningún estorbo en el morral.

Protección auditiva

La protección de nuestros oídos debe convertirse en lo habitual durante nuestras jornadas de caza. De no hacerlo, el sonido de los disparos acabará dañando nuestra salud auditiva. En este caso, de Peltor elijo los protectores LEP-100, unos pequeñísimos tapones capaces de atenuar los sonidos fuertes, aumentando los débiles con tres niveles de intensidad. Respecto a los habituales cascos, la posición dentro del oído garantiza una gran eficacia, siendo, eso sí, mucho más críticos con su correcta posición si queremos que no nos molesten. Se ofrecen dentro de una pequeña caja que actúa de cargador de batería. Su autonomía a plena carga es de 16 horas, suficientes para acompañarnos en cualquier jornada de caza.

Y otros complementos…

Reconozco que soy un poco caprichoso con esto de los detalles. Cuero, madera y acero, bien combinados, aportan ese toque de clasicismo y belleza que todos deseamos dentro de nuestro equipo, sin perder, eso sí, ni un ápice de efectividad. Estreno para la ocasión un cuchillo tipo Bowie de diseño propio realizado por el artesano de Taramundi Juan Carlos Quintana. Forjado y templado a mano, su hoja está hecha en acero 440-C, guarda de latón, completándose el mango en cuerna de impala, regalo de mi amigo Carlos Mas. El primo de mi padre, Armando Caldevilla Martínez, es otro de esos cazadores-artesanos. Me regala una horquilla de avellano y fresno, con la vara marcada por Tino, el de Valquemau, antes de cortarla.

Manos a la obra, cuero, agujas y guita encerada y a forrar. Las manías son las manías y yo, para cada uno de mis rifles, tengo una ‘forqueta’ que se adapta al perfil de su guardamanos.

A juego y con el mismo cuero realizo también una funda para el impala y otra para el Aimpoint Micro. Finalmente, un complemento que jamás debe quedar en casa: el chaleco de seguridad. En este caso el elegido es de Hart, cómodo, ligero, silencioso y caliente, ver y que nos vean.

Y no lo olvide amigo, este es sólo un ejemplo, el mío, seguro que distinto al suyo, adecúelo según su presupuesto, hay cientos de opciones válidas, decenas de marcas capaces de ofrecernos rendimientos similares a precios distintos.

Hágalo siempre con las ideas claras, debe cubrir sus necesidades de cazaderos, modalidades y piezas, no olvidando nunca algo muy importante: debe gustarle…

No veo el momento de salir a cazar.  CyS

El equipo en imágenes

Clasicismo y seguridad

Con diseño propio y fabricado por el artesano de Taramundi Juan Carlos Quintana, el cuchillo tipo Bowie tiene la hoja forjada y templada a mano en acero 440-C. Imagen de la derecha, abajo, clasicismo y seguridad no están reñidos, utilice siempre prendas de seguridad. Ahí tiene acero, madera y cuero sobre el chaleco de seguridad Hart. Nunca olvide que estamos obligados a velar para que no se produzca un solo accidente más.

Visores

El Zeiss Conquest V6 es un potente visor de calidad media-alta. El probado es un todoterreno con una combinación de 2,5-15×56. Cuenta con retícula iluminada y, sorprendentemente, a pesar de la potencia, no recurre a corrector de paralaje.

Protección auditiva

Cuide su salud auditiva, lo que perdamos no volveremos a recuperarlo. Los pequeños tapones Peltor LP-100 amplifican los sonidos débiles, atenuando los fuertes.

Varas de apoyo para el disparo y para ayudar a caminar

Forro de cuero para que no dañe al guardamos la ‘forqueta’ que me regala mi pariente Armando Caldevilla, dejando el arco de la horquilla con la misma curva del guardamanos. Observe las ‘heridas’ del avellano consecuencia de haberlo marcado en vida.

Punto rojo para completar la óptica utilizada

El punto rojo Aimpoint Micro H2 es tan pequeño que permite su transporte en la mochila para combinarlo con el visor convencional, según sea el puesto ocupado. Junto a él, el pequeño estuche de cuero confeccionado con el fin de protegerlo.

Precisión con el aimpoint Micro H2

Montado tan bajo, el Micro H2 permite un encare muy intuitivo, dando toda la precisión necesaria con una alta velocidad en la captación de puntería. Observe la diana conseguida a 50 metros con el equipo montado.

El retoque de las maderas

La culata original tiene lomo recto, dos nervios en la carrillera bávara, rematando el guardamanos en un schnabel suave en postizo de ébano. Realizada en madera de encina, la bola de la maneta es de mayor dimensión que la original de plástico.

Customización del rifle

Tres manos de Tru-Oil a muñequilla ayudarán a una mayor protección, a la vez que resaltan el veteado. Observe el trabajo realizado sobre pistolet y guardamanos.

Calculador balístico

Sobre el Zeiss Conquest V6 2,5-15×56, torreta balística ASV. El calculador balístico que la propia marca ofrece, nos da compensación de la caída de nuestra carga hasta una distancia de mil metros.

Diez años juntos…

Mi antiguo equipo, una customización con la que he cazado durante los últimos diez años.

Texto y fotos: Michel Coya [[email protected]]

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.