En un comunicado de prensa, la Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha recordado, a la vista de la noticia del hallazgo de un zorro calcinado en Toledo atrapado por un cepo, que el uso de este tipo de medios «está absolutamente prohibido en la región y en toda España».
El zorro fue encontrado por agentes medioambientales de Castilla-La Mancha en el transcurso de una investigación de incendios en la provincia de Toledo.
La FCCM de igual forma ha recalcado la necesidad de combatir la caza ilegal y todas aquellas prácticas no autorizadas que afectan a la fauna.
El presidente regional de la Federación de Caza, Agustín Rabadán, ha subrayado el compromiso de la entidad que aglutina a los cazadores de Castilla-La Mancha contra el furtivismo y la caza ilegal y como la federación viene ejerciendo la acusación en algunos de casos de forma ejemplarizante.
También ha recordado como, a través de la Oficina Nacional de la Caza, de la que es miembro, los cazadores actuaron como acusación en el doble asesinato de dos agentes medioambientales ocurrido en Lérida a manos de un desalmado, una labor que ha sido reconocida y agradecida públicamente por la propia la Generalitat Catalana.
Finalmente, Rabadán ha apuntado que en el caso de que se esclarezca la finalmente la autoría del deleznable hecho, la Federación reclamará que caiga sobre el mismo todo el peso de la Ley, añadiendo que el hecho resulta «especialmente repulsivo» teniendo en cuenta la imagen negativa que proyecta para un colectivo enorme que realiza una labor impagable en materia de gestión y conservación del medio natural.
En este sentido, ha recordado la labor social que realizan las sociedades federadas y titulares de cotos en el control de las plagas de conejos que arrasan las cosechas de los agricultores de la región.
