La organización agraria Asaja Extremadura ha solicitado al Gobierno regional la declaración de emergencia cinegética en el Parque Nacional de Monfragüe y su área de influencia ya que existe un exceso de unos 6.000 ciervos, lo que está provocando que escasee la comida y muchos de ellos enfermen de tuberculosis transmitiendo la enfermedad a las explotaciones ganaderas de la zona.
El presidente de Asaja, Ángel García Blanco, ha indicado que ahora mismo se calcula que, en una superficie de 18.000 hectáreas, puede haber unas 14.000 ciervas, lo que supone un exceso de ganado que se está traduciendo en una alta mortalidad e infecciones por tuberculosis, una enfermedad que afecta al dos por ciento de las explotaciones ganaderas de la región, pero que en el área de Monfragüe alcanza el 16 por ciento.
Esto va a suponer que el sector vacuno «desaparezca en cuatro o cinco años», ha dicho García, quien también ha pedido que se establezca la libre caza de jabalí durante todo el año en todas la explotaciones, y que se aprovechen los fondos Feader para realizar, en un periodo de tres años, el cerramiento integral con malla cinegética de todo el espacio natural ya que, de este modo, «sería mucho más sencillo controlar este tipo de población animal».
Igualmente desde Asaja se solicita una línea específica de ayuda para las explotaciones ganaderas afectadas por este problema que contemple la reposición de animales, así como el lucro cesante sufrido. «Que el Gobierno de Extremadura deje de mirar para otro lado porque en Monfragüe hay un problema», ha subrayado el responsable agrario.
García ha explicado en rueda de prensa que el Parque Nacional de Monfragüe es un ecosistema «creado por el hombre de una manera artificial mediante la intervención directa de todos los sectores implicados en el sector agrario».
Desde su catalogación como espacio protegido, la actuación de los implicados «ha sido sepultada por una mayor presencia de personajes e instituciones ajenas al agro que, como es habitual, desconocen la realidad del ecosistema», ha añadido.
“El parque está enfermo»
Por ello, Asaja cree que esta circunstancia está llevando a Monfragüe y su entorno a «una situación de degeneración que comienza a ser irreversible» ya que «la fuerte presión que ejercen las instituciones públicas y los fundamentalistas ecológicos ha supuesto una degradación del entorno que lleva a afirmar que el parque está enfermo», ha aseverado.
«El equilibrio sostenible en Monfragüe se ha roto y al enfermo, o se le cura, o se muere», recalca García, que ha insistido en que en la actualidad, la población cervuna y de jabalíes se ha multiplicado «exponencialmente» de manera que el parque «no es capaz de mantenerlos», lo que provoca que los más débiles enfermen y contagien al resto de especies de la zona.
De hecho, García ha aseverado que en la montería que se organizó el pasado puente de la Constitución en la Finca Las Cansinas, el 60 por ciento de los animales abatidos dieron positivo en tuberculosis y ha apuntado que esta cacería «fue una chapuza» porque «hay muchos fines de semana al año para organizar una montería» y no haciéndola coincidir con una gran afluencia de turistas al parque.
«El valor de Monfragüe viene dado por las aves rapaces y las cigüeñas negras y esto es lo que hay que proteger», ha insistido al tiempo que incide en que si no se controla la población de ciervos y jabalíes las explotaciones ganaderas de la zona están abocadas a desaparecer.
Fuente: europapress.es
