Según nota de prensa de la Federación Gallega de Caza, el conflicto que mantiene la Real Federación Española de Caza con ocho Federaciones Autonómicas, entre las que se encuentra la Federación Galega de Caza, desde el proceso electoral celebrado en noviembre de 2013, asiste a un nuevo episodio en el que la RFEC acaba de dar un golpe de estado al expulsar a un grupo de 20 clubs “no afectos” a la actual dirección federativa, miembros de la asamblea general de la RFEC y elegidos en el último proceso electoral. Entre los clubs expulsados se encuentran 3 sociedades de caza gallegas: Xabarín, de Pontedeume (A Coruña); Monte Penamaior, de Portomarín (Lugo); y Xungos, de Esgos (Ourense).