Montería

Garganta y ojuelos, antológico resultado

 

Para el primer fin de semana de febrero, Carlos Villar, este joven pero avezado y experimentado orgánico, había preparado dos citas monteras que muchos cazadores tenían señalado en rojo en sus calendarios particulares. Y es que son pocas las monterías que Carlos celebra al año, pero todas ellas son sinónimo de garantía y excepcional divertimento.

En esta ocasión, y como va siendo habitual, el grupo formado por catorce cazadores belgas no faltó a la llamada de Carlos, pues año tras año van repitiendo en cada una de las monterías que esta orgánico les ofrece.
Para este primer día del fin de semana se eligió la mancha Solana de Ruedas, enclavada en la emblemática finca de Garganta y Ojuelos. Las profundas hoyas de esta zona, bien resguardas de los rigores invernales, acogen numerosos encames para ciervos y jabalíes.
Una vez terminado el desayuno y realizado el sorteo, fueron saliendo diligentemente las armadas y posicionándose cada uno de los cazadores en sus respectivas posturas.
A las doce en punto de la mañana se abrieron los portones de los camiones, soltado 25 rehalas en cuatro puntos diferentes, estrategia que funcionó a las mil maravillas.
Minutos antes de la entrada de los perros al monte, algunos puestos ya habían cobrado varias reses, lo que vaticinaba que la mancha estaba bien cargada de animales.
Y así fue, después de tres horas de montería y un sinfín de tiros, lances y ladras, se presentaron en la junta de carnes un total de 42 venados, 41 jabalíes y 30 ciervas, lo que supuso un éxito sin precedentes, especialmente en cuanto al número de cochinos cobrados, en esta zona tan agreste de Sierra Madrona.

Destacar el gran porte de 3 de los venados y 6 navajeros que hicieron más lúcido aún el buen planten presentado.
Mención especial para todas las rehalas participantes, que obedeciendo en cada momento a las órdenes de Carlos, batieron el monte como mandan los cánones y fueron claves para lograr tan buen resultado.
Algunos de los puestos más afortunados fueron el nº 5 de La Pedriza, donde Mariano cobró 6 cochinos y 3 venaos. El nº 6 de El Peñón, ocupado por Ramón Márquez que abatió 4 jabalíes y 2 venados; y así muchos de los afortunados monteros que disfrutaron de una jornada inolvidable.

Finca: Garganta y Ojuelos
Mancha: Solana de Ruedas
Fecha: 2-II-2013
Orgánica: Carlos Villar Pareja
Puesto: 30
Rehalas: 25
Cupo: 3 V. Jabalí libre.

Una crónica de Antonio Adán Plaza

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