La Asociación del Corzo Español (ACE) alerta sobre la sobrepoblación de hembras que puede provocar desequilibrios en las poblaciones con el riesgo que supone de aparición de enfermedades. Abogan por un mayor control de las corzas e instan a cotos y administraciones a utilizar los permisos de caza para adecuar el número de ejemplares
Guadalajara con altas densidades de población, “comparables con las de Soria”
Aunque no existen estudios concretos y específicos sobre las poblaciones de estos animales, la Asociación del Corzo Español realizó un estudio sobre la predación del águila real sobre la especie que permitió testar las poblaciones.
Un trabajo que puso de manifiesto que la provincia de Guadalajara tiene unas densidades de población muy altas, “comparables con las de Soria”, comenta Florencia A. Markina, presidente de la Asociación Nacional del Corzo, mientras que Toledo y Cuenca tienen unas poblaciones bastante buenas con poblaciones jóvenes y con una producción muy alta. sobrepoblación de hembras
Este biólogo con más de 25 años de experiencia estudiando el corzo destaca que el principal factor que frena la expansión del corzo en la región es la presencia del ciervo. “Donde hay grandes poblaciones de ciervo, el corzo desaparece”, al explicar que existe una competencia por el alimento pero también parasitaria.
En este sentido, alerta que han encontrado en Guadalajara la presencia de ‘la mosca de los barros’ en los corzos que es un parásito específico de los ciervos y que la han transmitido a esta especie. Un hecho que asegura supone una novedad puesto que antes no se había observado esta transmisión de parásitos entre ambas especies.
Aumenta la afición a esta especie
La expansión del corzo ha provocado que cada vez sean más los cazadores que se aficionen a esta especie que tiene sus propias características y dificultades a la hora de rececharlos y cazarlos.
Además, hay que tener en cuenta que al tratarse de poblaciones jóvenes en Castilla-La Mancha están constituidas por animales fuertes, “los colonizadores suelen ser los individuos más fuertes con lo que ahora mismo en Guadalajara están dando los récord de España en cuanto a trofeo”, explica Markina lo que contribuye a que la demanda de este tipo de caza se haya disparado en algunas zonas. sobrepoblación de hembras
Para este experto, en Cuenca hay también mucha afición, y cada vez está tomando más interés en el corzo, mientra que en Toledo es la zona con menor afición. Sin embargo, recuerda que hasta la región se desplaza muchos cazadores de la zona de Madrid para practicar esta afición.
Esta expansión podría verse acentuada este año debido a que las medidas de confinamiento impuestas por el coronavirus han coincidido con la época en la que debía abrirse la veda del corzo lo que lo ha dejado sin su principal depredador en Castilla-La Mancha; el hombre. Un factor que puede entorpecer el buen desarrollo de las poblaciones.
«En la provincia de Toledo existe una desproporción de nueve hembras por cada macho»
En este sentido, desde la Asociación del Corzo abogan por usar la caza como un sistema de control de las poblaciones para lo que consideran imprescindible que se atiendan también los cupos de hembras.
Y es que, según explica este experto, existe un grave problema al centrar la caza sólo en los trofeos lo que provoca que haya un desequilibrio con muchas más hembras que machos lo que contribuye a la sobrepoblación de hembras.
Por ello, defienden desde hace años la necesidad de cazar el mismo número de machos y hembras.
Según los datos de los que disponen, en la provincia de Guadalajara las poblaciones están más equilibradas con una proporción de tres hembras por machos, gracias al trabajo que llevan desarrollando desde hace años para fomentar su caza.
Sin embargo, en la provincia de Toledo existe una desproporción de nueve hembras por cada macho. “Si no se toman medidas y una gestión adecuada a corto o medio plazo supondrá un crecimiento excesivo de la población y la entrada de enfermedades parasitarias”, asegura Markina.
Caza de hembras de corzo
Un punto donde las administraciones son todavía reacias a autorizar la caza de hembras debido a la herencia proteccionista respecto de ellas que se ha heredado de la ley de los años setenta y apela a la responsabilidad de los cotos para que exijan a la Administración la autorización de los cupos de hembras porque de lo contrario podrían aparecer problemas de enfermedades que terminen con la especie en un medio o largo plazo.
Además, el biólogo recuerda que la creencia que existe de que por tener muchas aumenta la población de corzos y, con ello, los trofeos es falsa.
Explica que cuanto más individuos hay los trofeos son menores, “por eso es importante mantener un equilibrio adecuado de la población con el medio donde están”.
Ante esto, y la situación que se puede generar tras un año con las capturas reducidas por el coronavirus, insiste en apelar a la responsabilidad de cotos, cazadores y administración para realizar una gestión responsable de las poblaciones y adoptar medidas antes de que su crecimiento pueda derivar en problemas graves. sobrepoblación de hembras
Fuente: eldiadigital.es