En la prensa

Obras maestras de los armeros de Tula (Rusia)

Fuente: La Voz de Rusia – 26/07/2012

En el museo de armas de Tula se ha inaugurado una exposición bajo el nombre Escopetas de caza vistas desde la óptica de la historia. Esta cuidad, situada a ciento noventa kilómetros al sur de Moscú, tiene la fama de ser el centro histórico de los armeros rusos.

En la muestra se exhiben los mejores modelos de escopetas, fabricados en Rusia y otros países entre el siglo XVIII y la época contemporánea.

El Museo de Armas de Tula es uno de los más antiguos en Rusia. Surgió como parte de la Fábrica de Armas, fundada en 1712 por medio del decreto de Pedro el Grande. El Museo se granjeó la fama mundial las copiosas colecciones de piezas únicas en su género y fue incluido en la lista “100 grandes museos del mundo”.

Hoy por hoy, en el Museo de Tula se guardan más de once mil piezas raras, siendo de señalar que las escopetas representan uno de los componentes más numerosos e interesantes. La exposición “Escopetas de caza vistas desde la óptica de la historia” presenta ciento veintiocho modelos más relevantes de esta arma de fuego, entre los que cabe destacar la escopeta de tres cañones del siglo XIX producida en el Imperio Austro-Húngaro, así como carabinas de Alemania, Francia, EEUU y otros países.

Una buena parte de la exposición está merecidamente consagrada a las escopetas fabricadas por los armeros de Tula. Estas armas de fuego descuellan por una sofisticada ejecución, soluciones técnicas sin parangón y belleza exterior. Las escopetas de Tula decoradas con plena razón son consideradas obras maestras del arte aplicado, relata la directora adjunta del Museo, Helena Drozdóva:

—La tradición de decorar escopetas es muy antigua y se mantiene en Tula hasta el día de hoy. Para el decorado se utilizan incrustaciones, digamos, de alambre de oro o plata, marfil, cornamenta, especies decorativas de madera. También se emplean doradura y aplicación de diversos ornamentos. Son armas muy bellas cuyos cañones están elaborados del acero damasquino.

Una de las muestras es la carabina fabricada en memoria de la visita que en 1775 había realizado la Emperatriz Catalina la Grande a la Fábrica de Armas de Tula. La escopeta destaca por su finura y belleza, la culata está decorada con un tenue ornamento, mientras en el cerrojo y la culata aparecen guirnaldas de rosas de oro. Por el estilo de ejecución son afines a esta carabina las pistolas de caza con sección cuadrada de los cañones. Sus empuñaduras están adornadas con hilos de plata que armonizan con un leve grabado de los cerrojos.

Llama la atención la escopeta del año 1745 года con sección triangular. Durante se fabricación se emplearon diversas técnicas de procesamiento del metal y la madera: repujado, grabado, inserción de alambre de oro o de plata y los famoso “diamantes de acero” de Tula.

La muestra está organizada de tal manera que los visitantes puedan seguir la evolución de las escopetas de caza. Entre las carabinas que produce hoy la Fábrica de Tula, está representado “Zubr” que, por tradición, está ricamente adornado. La escopeta está provista de varios cañones desmontables, para diversos tipos de la caza.

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