Como una mañana cualquiera, José Joaquín Álvarez se desplazó hasta su huerta ubicada en el núcleo de El Bescón, en Rioturbio, esperando ir a regar y controlar los cultivos que tiene plantados.
Cual fue su sorpresa cuando al llegar se encontró toda la tierra removida y las hortalizas arrancadas. Un jabalí había entrado desde el monte en el terreno, pese al cierre, y había destrozado todo su trabajo. Y así, hasta en cuatro ocasiones en el último mes y medio. Álvarez no es el único vecino de la Hueria de San Juan con este problema, ya que según apunta «a todos los que tenemos pequeñas huertas por aquí nos han entrado los jabalíes».
José Joaquín Álvarez no vive de la agricultura. De esta pequeña huerta se aprovisiona de verduras para su casa y su familia. Aún así, está muy molesto con estos «asaltos» por parte de los jabalíes, porque «lo que hacen es destrozar el trabajo que hacemos y fastidiarnos toda la cosecha». Los agricultores de esta zona se encuentran con el problema de que estos daños no conllevan una indemnización, lo que quiere decir que cultivo dañado, cultivo y dinero perdidos.
«En mi caso me destrozaron pimientos, cebollas, repollos, patatas… todo lo que tenía», afirma José Joaquín Álvarez, que reclama un mayor control por parte de las administraciones para evitar que los animales entren. «Si fuera un caso excepcional igual no decía nada, pero a la mayoría de nosotros nos han entrado y nos lo han puesto todo patas arriba», lamenta.
Pese a los daños, a José Joaquín Álvarez, jubilado de la minería, no le van a minar la moral. Tiene trabajo por delante, pero pondrá todo lo necesario para que este año se coman en casa las hortalizas de su huerta.
