Fuente: eldiariomontanes.es
«Estaban en mitad de la carretera. Eran unos ocho a diez. En grupo. El coche que iba delante nuestro chocó contra uno de ellos. Yo logré esquivar a otro y pasé por encima de un tercero. No los vimos hasta que estuvimos encima, era un sitio sin iluminación y llovía. Aún tengo el susto en el cuerpo». Rafael, el conductor de un Seat León, lamenta los daños en su vehículo -«la defensa dañada y el capó abollado»-, pero también se felicita de que «no haya ido a mayores. Iba con mi hijo pequeño».
Cuarenta y ocho horas después de que unos jabalíes provocaran un grave accidente en la Autovía A-8, en Val de San Vicente, otra manada, formada por ocho o diez animales ha causado otro. Esta vez a la altura de Carandía, en la Nacional 634. En él se vieron implicados cinco vehículos, aunque sorprendentemente tan sólo dos se detuvieron para comprobar los daños y esperar la llegada de la Guardia Civil y del personal de la Demarcación de Carreteras. «Hemos tenido mucha suerte», ratificaba Agustín, que también sufrió serios daños en la defensa y en el lateral de su Opel Corsa. «Ahora vendrán los líos para poder reclamar los daños», explicaba Rafael. «¿Qué nos ha dicho la Guardia Civil? Nada. Han levantado el correspondiente atestado y ahora nos tocará reclamar al coto». El suceso de ayer deja cinco coches con daños, dos jabalíes muertos y un enorme susto. Este es el tercer accidente grave que causan los animales en los dos últimos meses. El pasado 4 de noviembre, dos mujeres morían al ser arrolladas por un vehículo. Se habían bajado de su coche, que previamente impactó con un jabalí en Ontón.