En la prensa

Artículo de opinión: «Domínguez, el brazo tonto de ‘Mar-Ley»

No dejéis de leer este interesante artículo de Tomás Blanco, autor de los reportajes sobre Lobo Marley en la Sierra de la Culebra, publicado hoy en el diario La Opinión de Zamora.

Domínguez, el brazo tonto de «Mar-Ley»

Cualquier cantamañanas se autodenomina discípulo de Félix Rodríguez de la Fuente y se atreve a homenajearlo

Torrente. el brazo tonto de la ley. es el antihéroe más barriobajero y casposo que apatrullando la ciudad se cree salvar a la patria de «fumanchús» y otomanos. En su segunda entrega formidable Misión en Marbella Torrente se rehace a sí mismo para erigirse en la tercera como Torrente el Protector y en una España en decadencia por la «crisis letal» prepara su golpe de oro: Operación Eurovegas.

Mucho se ha acusado a Santiago Segura de mostrar a un protagonista tan patético, un tanto exagerado y bastante bochornoso. Pues bien, conociendo como voy conociendo poco a poco a Lobo Marley, creo que Segura se quedó corto, si es que no se inspiró en este personaje. Lo de personaje, lo digo porque no me creo que una persona de la edad y formación de don Luis Miguel Domínguez, pueda hacer el ridículo de semejante manera, al menos que se haya metido en su propia piel para interpretarse a sí mimo, algo por otro lado normal en nuestros días.

Domínguez, el brazo tonto de «Mar-ley», al igual que Torrente que, chapuza tras chapuza, consigue salir invicto sin saberse ni cómo ni por qué. Al igual que el detective, don José Luis, el «naturalista» don Luis Miguel ha formado una banda nutrida con lo mejor de cada casa y tras perder su fortuna (no sé si de forma fraudulenta como el detective) se planta en el noroeste zamorano «Misión en la Culebra» para autodeclararse «Domínguez, el Protector» del lobo y aprovechando que la comarca más deprimida de España está en «crisis letal» culmina con motosierra en mano apatraullando los riscos de Peña Mira en su con su ya legendaria Operación Euro-Casetas.

Pero no contento y con una banda ya mermada por falta de botín, con la excepción de los porteros de discoteca en busca de camorra, que por cuatro euros Lobo Marley contrata para sus salidas de campo, Domínguez nos adelanta su siguiente entrega: «Homenaje al Maestro». El guión más o menos se ha filtrado: Domínguez, más Torrente que Quijote y con menos vergüenza torera que Belén Esteban, se presentará con sus matones en Villardeciervos, con el objetivo de hacerle un homenaje al maestro Félix Rodríguez de la Fuente.

Torrente siempre tomó como maestro al Fary, a quien en cada entrega hizo su correspondiente homenaje, entendiéndose, claro está, dentro de la ficción. Dudo que don José Luis Cantero de estar vivo, y ser Torrente una persona real, estuviese orgulloso de un seguidor tan patán. Tampoco creo que nadie del entorno del Fary permitiese a un Torrente hacer tales homenajes en la vida real.

Pues Domínguez, con un par de y con tal de tocarlos, se planta en la Culebra como el que se planta en la casa del gran hermano y a puerta gayola espera recibir al toro. En este encierro el toro es él y a sabiendas de que en los sanfermines a los astados los corren a gorrazos, pues que mejor lugar para buscar el martirio, que en la sierra que vio nacer a los lobos del homenajeado Félix Rodríguez de la Fuente. Sierra que el propio Domínguez, a golpe de motosierra, destroza cuando le da la gana, porque él lo vale, ¿usará Pantene champú? Como miura experto en encierros, Domínguez soltará primero a los cabestros, no siendo que en vez de con la Opinión enrollada, en la Carballeda lo corran a cayatazos. Lo de ser mártir hoy en día mola si te acompaña la audiencia. Si, por un casual, un lugareño le asienta los cuadriles con la cayata o la Guardia Civil hace lo suyo con el bastón reglamentario, Domínguez sería el hazme reír nacional y de San Lobo Martirley se quedaría en el que fue a por lana y salió trasquilado. Como esto lo sabe muy bien el de la camiseta (mira que es fea), mirará la partida desde la barrera y al igual que Torrente, quien al ver que pintan bastos, deja a los chavales y a los discapacitados que abran mano mientras él se queda de copas.

Por tanto, que nadie se lleve las manos a la cabeza si el próximo sábado los camorreros de Lobo Marley ofrezcan leña cortada con motosierra o las ya conocidas rubias de bote de la banda se tiren (del verbo «arrojar») a los guardias buscando candela. Cuando se monte la de Fuenteovejuna y le caiga el primer guantazo al chaval que en silla de ruedas acompaña siempre a Domínguez a modo de escudo humano, tendremos la foto, que nadie quiere, pero que se intuye, en la portada de todos los periódicos. De esta manera, Domínguez se llevará la recaudación sin despeinarse un pelo para subir a los cielos a jugar un ratito con el osito de la osa mayor. Desde su constelación, indicará a los macarras que, en nombre de la naturaleza y del lobo, le mantengan el negocio a golpe de espada encadenada y gasolina, al igual que las FARC en Colombia.

Con el corazón más partío que Alejandro Sanz, veo impotente cómo en mi país proliferan como setas más embaucadores y farsantes que en toda la picaresca de las letras españolas. Mientras los científicos hemos tenido que salir por la puerta de atrás, cualquier cantamañanas se autodenomina discípulo y se atreve a hacerle un homenaje al maestro Félix Rodríguez de la Fuente. No soy muy de derechas que digamos, pero comparto esta mítica de Torrente: «Con Franco esto no pasaba, pero tuvo que venir la Constitución de los cojones». Siempre se dice que si Franco levantase la cabeza esto o lo otro. No sé que haría Franco, pero sí estoy seguro de que si Félix levantase la suya, se convertiría en el Tío la Vara y, con una de fresno, limpiaba el monte de tanto lobojeta e intruso. Sin conocer al doctor Rodríguez de la Fuente, me temo que Domínguez se llevase la primera somanta del odontólogo de Poza de la Sal (menudo era el de la Bureba), quien, entre medida y medida, le explicaría que el lobo tan sólo fue un capítulo, trucado, del Hombre y la Tierra y que el respeto a las personas y al medio que éstas habitan es la norma número uno de la ecología, de la convivencia y del sentido común.

Ahora, en serio, me gustaría hacer un llamamiento: ¡Lobo Marley viene buscando bronca y Félix les importa lo que a un asno un violín! Es como destrozar a martillazos el Taj Majal y presentarte al día siguiente en Agra (India) para hacerle un homenaje a Ghandi y esperar que los lugareños te hagan la ola. ¡Hay que tenerlos ‘cuadraos’!, no los cojones, sino los hemisferios cerebrales. Yo, por favor, os pido a los de la Culebra no le entréis al trapo de la violencia. Como dice Serrat, «cada loco con su tema». Lobo Marley sabe perfectamente que no tiene ni media hostia, pero viene buscando el cuerpo de Cristo al completo, en el sentido literal y en el figurado. Aunque se están rifando no le deis la comunión. Si todavía tienen vergüenza de presentarse, que le hagan el homenaje a Félix y que por la misma Nacional 631 que lleguen, la tomen de vuelta. El mejor desprecio es el no aprecio, sus matones cobran por horas y el presupuesto escasea y las rubias de bote ya han visto que lo que lo que hay debajo de la faldriquera no es lo que se esperaban. Al igual que en el inicio de Torrente en Marbella, tras perder su fortuna por avaricioso, Lobo Marley está «solo, sin dinero y sin mujeres». Sin embargo, si el sábado (por mañana) se reparte ensalada, vais a beber Lobo Marley hasta en el vino de consagrar y digo vais, no emulando la famosa locución «vais vais» de Torrente, sino porque, como Poncio Pilatos, a un océano de distancia, yo me lavo las manos y a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga. Que no os tome el pelo Mortadelo con crecepelo del todo a cien.

vía Domínguez, el brazo tonto de «Mar-Ley» – La Opinión de Zamora.

One Comment

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.