Fuente: gomeranoticias.com
La Sociedad de Cazadores ‘Nuestra Señora de Guadalupe’ ha salido al paso de una información publicada por el periódico digital ‘Gomeranoticias’, remitida a este medio de comunicación por el consejero del CCN en el Cabildo Insular de La Gomera, Pedro Medina Calero en la que se cuestionaba la legalidad del Coto ‘Los Perdigones’ perteneciente a este colectivo.
Señalan que “no deja de resultar cuanto menos extraño, tanto la fecha de las publicaciones como las personas que han redactado las mismas, y que por ello es por lo que consideran conveniente, realizar algunas puntualización, que se publican íntegramente por su interés, tras haberse remitido por el presidente de la Sociedad señalada, Manuel Padrón Darias la siguiente réplica a la redacción de este periódico digital:
“1.- ¿Por qué se publican estas noticias precisamente ahora?
Aclarar para aquellos que lo desconozcan, que tanto el Coto Los Perdigones como La Sociedad Nuestra Señora de Guadalupe se fundó el año 1976 por lo que tiene una experiencia y un rodaje de 37 años aproximadamente. En todos este tiempo no conocemos ninguna información periodística ni de cualquier índice que haga referencia a la ilegalidad del mismo. No hemos recibido en esta Sociedad requerimiento alguno en esta dirección ni desde institución gomera alguna, ni desde el Gobierno de Canarias, ni siquiera de Medio Ambiente, Institución que regía los destinos de la actividad cinegética a nivel nacional.
Queremos referir que cuando se fundó la Sociedad Nuestra Señora de Guadalupe, así como el Coto en cuestión, la actividad cinegética pertenecía a Medio Ambiente disponiendo, en consonancia con la misma, de todos los ‘papeles imprescindibles’ par el funcionamiento tanto de la Sociedad como del Coto. Diríamos más, a lo largo de este período se han celebrado varios campeonatos regionales y provinciales de caza. Muy difícilmente se hubieran celebrado trales eventos sin una situación de legalidad.
Cuando las competencias sobre la actividad cinegética fue asumida por el Cabildo Insular, la Sociedad a la que nos referimos llevaban años de rodaje y experiencia. Añadir que de forma religiosa hemos pagado tanto esa Institución como al Ayuntamiento de San Sebastián los correspondientes impuestos anuales, antes y después del cambio de competencias.
Cuando surgió nuestra sociedad, y en años posteriores, habían dos cotos privados más. El último de ellos en desaparecer fue el de ‘Benchijigua’ hace ahora cuatro años, perteneciente a Fred. Olsen, por desinterés de los propietarios en el mantenimiento del mismo. Jamás hemos encontrado denuncia alguna a nivel periodístico o de otra naturaleza en referencia a estos cotos. Sr. Medina, no hemos visto publicada denuncia alguna en los 37 años de vigencia de la Sociedad Nuestra Señora de Guadalupe, relacionada con los cotos privados a los hemos aludido.
Regresemos a la pregunta inicial: ¿Por qué ahora?. Podemos entender perfectamente que usted, siendo un neófito en el tema cinegético, así como de la bisoñez de la que hace gala en otros temas sobre la política insular, no nos extraña que su interés pueda radicar en la captación de simpatizantes, tengamos en cuenta que en La Gomera el censo de cazadores se aproxime a los 600, y ante la eventualidad de que en las próximas elecciones su escaño en el Cabildo Insular pueda tambalearse, intente arañar votos donde pueda. Es triste que esté siendo manipulado por determinados personajes que le dictan lo que tiene que decir o publicar, máxime teniendo en cuenta que algunas de estas figuras, es vox pópuli, han arrastrado al Consejo Insular de Caza, órgano que gestiona la actividad cinegética en la Isla, por concesión del Cabildo Insular, a unos niveles de ruina y de déficit interno prácticamente insalvables. Todos los que practicamos esta noble actividad de la caza, intuimos y sabemos en qué estado se encuentran las cuentas del Consorcio. Según nos consta, no hemos visto denuncia alguna sobre esta situación por parte del señor Medina. No queremos entrar en detales sobre los presupuestos del mismo, ya que de eso debe encargarse el Cabildo de La Gomera. Todos sospechamos de la gravedad del asunto.
Sr. Medina, ¿no se ha planteado usted que puede estar actuando de marioneta en manos de determinados individuos que intentan desviar la atención de un problema de una gravedad inusitada relacionado con recursos económicos públicos, para formar una cortina de humo que despiste a la opinión pública?. Podemos llegar a comprender su intencionalidad política de perpetuarse en un cargo público, cada uno se busca la vida como pueda, pero no a costa de cuestionar verdades inexorables.
En el artículo remitido por usted a Gomeranoticias, existe una serie de imperfecciones , por no decir mentiras, ya que tiene una finalidad hiriente en las mismas, referidas tanto al número de socios de la Sociedad de Cazadores Nuestra Señora de Guadalupe como al número de propietarios que negaron la autorización para la inclusión de sus terrenos en el Coto Los Perdigones. Usted sabe que todos los propietarios fueron requeridos en su momento y que todos firmaron los correspondientes permisos. Otra cosa diferente es que usted quiera manipular a la opinión pública con mentiras y verdades a medias. Cuando quiera informarse de forma veraz sobre cualquier tema pregunte a los que conozcan del mimo, no lance soflamas para engañar a la población, máxime en el momento actual en el que la valoración de los políticos está bajo mínimos. Poco se ayuda usted actuando de esta manera. Si su proceder en todos los temas relacionados con su vida política actúa de la misma forma, tenemos la impresión de que sus día en la vida pública están más que contados.
Aclararse, también, que cuando se formó la Sociedad y el Coto al que usted alude, allá por el año 1976, ni el Gobierno de Canarias existía en ese momento; le recordamos que comenzábamos la transición democrática y las diferentes catalogaciones de espacios protegidos (parques naturales, reservas de la biosfera, etc) no habían sido siquiera soñadas. Muy difícilmente nos puede hacer mención a Reserva Natural de Majona o Reserva Integral de Puntallana, espacios que aparecieron en los últimos años de la década de los 80. Aclararle también que cualquier espacio público protegido tiene sus propietarios particulares, y que éstos en su momento dieron conformidad al proyecto que se venía gestando.
Señor Medina, un político debe estar al servicio de los ciudadanos, su integridad debe estar por encima de todo, con mentiras o medias verdades, no se llega a ninguna parte, por lo que le comunicamos que en lo sucesivo se informe primero y actúe posteriormente».