Fuente: elcorreo.com
La temporada de caza menor en los cotos de la Sociedad Riojalteña de Caza y Pesca se abre el próximo 10 de noviembre. Pero lo hará marcada por la drástica reducción impuesta en el listado de fechas reservadas para la captura de la perdiz.
Nunca, confirmaron fuentes consultadas por este medio, fueron tan pocas. El año pasado se limitaron, en concreto, a ocho; en esta ocasión serán tan sólo seis. Se otorga licencia para ello el 10, 17 y 24 de noviembre, y el 1, 8 y 15 de diciembre. Con matices. El primero de diciembre sólo se podrá cazar una pieza; el restos de los días, como máximo dos. Son las consecuencias de la drástica caída advertida en la población de esta especie cinegética en la zona. Y, en buena medida, del interés que los propios responsables de la sociedad han mostrado por afrontar lo antes posible su recuperación, al constatar los extremos recogidos en el censo realizado por los técnicos de la Dirección General de Medio Ambiente, responsable último de los planes de caza de cada uno de los términos de la región.
Según recoge el acuerdo adoptado por su junta directiva, la campaña de caza se prolongará, en principio, hasta el 26 de enero otorgando las cuatro primeras fechas ya referidas para la caza de la perdiz y la liebre, reduciendo a una la licencia de captura de ésta última en todas ellas. Los días 8 y 15 de diciembre sólo se podrá cazar la perdiz. En ningún caso el 6, 22, 25 y 29 de ese mismo mes, dejando claro que en ningún caso se podrá superar el número de cuatro escopetas por ‘mano’, y limitando a tres los perros por los que podrán ser acompañados en la batida por los cotos de la comarca jarrera.
A lo largo del mes de enero, los días 1, 5, 6, 12, 19 y 26, los cazadores podrán abatir palomas, malvices, conejos… Pero, remarca textualmente la circular de la Riojalteña, de ninguna manera perdices y liebres, especies que quedan protegidas de forma explícita hasta la próxima campaña.
Por cierto. Con motivo de la festividad de San Huberto, la sociedad ha programado para este sábado, 8 de Noviembre, una misa en la Basílica de la Vega a las ocho de la tarde y una cena de hermandad a las nueve en Restaurante Las Cigüeñas. El precio por cubierto para los socios es de treinta euros. La reserva se realiza en la sede de la entidad.
