Hace ya casi cuatro décadas que no escribo una carta a los Reyes Magos, desconozco si es por melancolía, tristeza, nostalgia, o porque no tengo la ilusión que tenia de chiquillo, de cualquier forma, reflexionando al pie de una chimenea en el campo, me he dado cuenta, que como todo el mundo pide y los que son más puntillosos, exigentes, o incluso complicados, esos, exigen, por esa razón me habilito para pedir.
Me explico mejor, continuamente salen en las noticias personas que exigen, y lo hacen de esa forma “porque ellos lo valen” ahora por poner un ejemplo con los test de antígenos, exigen que le den uno, y aunque en alguna comunidad autónoma lo han hecho de esa forma, lo cierto es que, si quieres un test de antígeno, tan solo debes comprarlo en la farmacia, pero no, el sentir general de los que piden es “a mí me lo tienen que dar”.
Bueno que me desvío del asunto, cuando tengo una conversación donde el contrario pide constantemente, o abusa del condicional, con frases como:
–Si yo tuviera esa finca…
–Si fuera rico…
–El cochino grande estaría en el suelo si el tres de la traviesa del valle hubiera sido mi puesto.
–Si me tocara la primitiva…
Cuando abusan del uso del condicional decía, utilizo la frase: “PUES ESCRIBE UNA CARTA A LOS REYES MAGOS”.
Carta a los Reyes Magos
Pues eso me he decidido a hacer.
Entiendo que la nostalgia ayuda, pues rememora tiempos lejanos donde pedías en la carta unas cosas por lo general juguetes y los Reyes Magos te traían los que les salía de las narices (que para eso vengo de familia numerosa).
Bueno pues ya que pido (siendo consciente que pido cosas difíciles) me he planteado pedir algo intangible y difícil de cuantificar.
¿Qué es lo que creo que nos hace falta en la caza? Matar más y mejor, mayor calidad en los trofeos, tener más jornadas de caza, todo esto me parece banal y fútil o dicho de otro modo, insustancial.
Creo que estaría mejor aquello de divertirme más, que pudiese compartir mis jornadas de campo con un buen amigo, aprendiendo de él, tomando una copa de vino al pie de una candela, de disfrutar de una ladra, o tan solo de la carrera de una cierva, también el que te cruce un marranchón el cortadero a toda mecha y al verle pequeño, decidir no tirar.
De ver cómo un catedrático se escapa de la mancha que se está batiendo por el sopié donde no hay nadie puesto, pues ese sopié conduce al camino donde están los coches.
Pero entonces, creo cierto decir que la petición sería tan solo para mi disfrute o para mi ego. No, hay que pedir algo más genérico que afecte a todos los cazadores. No tengo por costumbre el convertirme en ‘adalid’ de nada, pero…
…Ya que pides, pide bien. ¿Qué pedir entonces? El caso es que pensando en el asunto estaba una noche viendo el telediario cuando se me ocurrió aquello que debería pedir a los Reyes Magos.
RESPETO Reyes Magos
Respeto, respeto, que concepto más amplio más inabarcable, más sencillo y complejo a la vez.
Pido a los tres Reyes Magos respeto para la caza.
Respeto para los cazadores, por parte de los no cazadores, de los animalistas, de los verdes, y de toda persona, que el hecho de practicar/ejercer una pasión, un deporte, una afición, un hobby, un divertimento (no sé como calificarlo para quedarlo claro de forma que nadie se ofenda).
Pido respeto de la misma forma que respeta mi persona otras aficiones hobbies deportes, pasiones, divertimentos varios que no comparto.
Se da el caso, por aquello de poner un ejemplo que no me gusta el curling pero respeto a aquel que lo haga o lo practique, por mucho que esté en las antípodas de mis aficiones. De igual forma que no me gusta la caída libre o el wingfly.
En los telediarios al cerrar los deportes últimamente nos suben imágenes de deportes extremos, con un grave riesgo para aquellos que lo practican, pues bien, LO RESPETO.
He visto en esos telediarios, hasta una persona sin piernas subir al monte Elbrús, personalmente se me antoja cuando menos doloroso (al pensar donde se apoya para coger impulso cuando no lo hace con las manos) a la par que extremo. Yo, que tengo dificultad para subir un cerro de apenas quinientos metros, cuando menos me acongojo, pero lo respeto.
Solicito para mi afición lo mismo que doy
Solicito pues lo mismo para mi afición, lo mismo que doy.
Pido respeto también, pues por mi forma de cazar, tanto si doy la montería como si voy a puesto, tengo la costumbre de rezar un padrenuestro pidiendo que la jornada salga bien a la par que pido por no tener accidente, pido por que los perros batan una mancha en condiciones, porque mi vecino de puesto no haga tiros comprometidos, porque no los haga yo, porque las inclemencias del tiempo me permitan disfrutar del día y, sobre todo, pido por aquellos que no están aquellos que me enseñaron tanto en el monte, y con los que disfrutaría tanto con su compañía, a aquellos que añoro de corazón.
Pido respeto por dirigirme, en los rezos públicos a la Virgen de la Cabeza, y a la Virgen de Guadalupe. Que sí, que si alguno no quiere que no rece, que no se encomiende, que no obligo a nadie, pero solicito, pido y ruego que si alguien no lo hace, no moleste a los demás que rezan, que no hable mientras se rece, que se descubra por RESPETO a los demás, que no moleste.
¡VIVA ESPAÑA! Reyes Magos
Pido respeto pues siempre que acaba el rezo tanto si lo empiezo yo como si no, acabo, con un ¡VIVA ESPAÑA! Qué menos que dar un viva al país que me vio nacer, al que ha permitido a los míos vivir honradamente, a ese país tan grande como maravilloso. Ese país donde puedes cazar en alta montaña, en dehesa o en marismas, en lagunas, o montes, en costas, o deltas. Qué menos, ese ¡VIVA ESPAÑA! carece de significado político, eso (el significado político) se lo dejo a ellos, que unos lo demonizan y otros lo exaltan. No, nada tiene que ver. Que me encanta cazar desde Asturias a Huelva, de Badajoz a Valencia, de Cádiz a Lérida, de conocer gentes maravillosas, sencillas, nobles y honestas. De conocer nuestra extensa gastronomía, de conocer pastos, dehesas, praderas, brezales, piornales, roquedos, glaciares.
Pido respeto señores porque yo también lo doy por mis creencias y mis actos, pido respeto por ser cazador.
Cuando entiendas que hay otra forma de ver las cosas entenderás el significado de tolerancia
“Debo respetar las opiniones de otros incluso si no estoy de acuerdo con ellos”. Herbert H. Lehman
