Aunque el baño del corzo resulta refrescante con este calor, al final resulta bastante angustioso ver como el animal es incapaz de salir del agua.
Si esto mismo hubiese pasado en un canal, de riego o de producción eléctrica, el resultado hubiese sido un auténtico drama, como pasa cada día.
Por suerte en esta ocasión la ayuda para salir resultó eficiente para solucionar el problema.