El Comité de Flora y Fauna del MITECO estudiará el próximo 22 de abril si prohíbe su caza sostenible, a pesar de que los datos científicos recabados a través del proyecto Coturnix desmontan la postura del Ministerio
El sector cinegético pide a las comunidades autónomas que no cedan ante las presiones ‘ecologistas’ sin contar con los datos científicos disponibles
El Gobierno de España, decidido a declarar la codorniz como especie en extinción y prohibir su caza
El Gobierno de España estaría decidido a declarar la codorniz (Coturnix coturnix) como especie en extinción y prohibir su caza en el Comité de Flora y Fauna del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) que se celebrará el próximo 22 de abril en base a la solicitud de la asociación SEO-BirdLife, según ha podido saber la Real Federación Española de Caza (RFEC).
Esta catalogación implicaría acabar con la caza de la especie.
Los datos científicos recabados a través del proyecto Coturnix contradicen la decisión del Ministerio de declarar la especie en peligro de extinción
El sector cinegético considera inadmisible la inclusión de esta votación en el orden del día sin contar con informes que lo avalen, cuando los datos científicos recabados a través del proyecto Coturnix contradicen la decisión del Ministerio de declarar la especie en peligro de extinción, y pide a las comunidades autónomas que no cedan ante unas presiones que solo buscan acabar con la caza.
De hecho, avanza que ya está movilizándose para hacer llegar a través de las federaciones autonómicas de caza toda la información necesaria a los responsables de las distintas comunidades autónomas para que puedan tomar una decisión teniendo en cuenta todos los datos, así como las graves consecuencias que tendría la prohibición de la gestión cinegética de la codorniz para la propia especie.
Igualmente, critican que el Ministerio de Transición Ecológica haya admitido esta votación sin tener en cuenta al Ministerio de Agricultura, al sector cinegético ni a la comunidad científica, demostrando una vez más que se trata de una decisión ideológica que nada tiene que ver con criterios técnicos o científicos.