La Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha asegurado que el Gobierno de la región ha abdicado ante el sector animalista más radical al elaborar un proyecto de Ley de Bienestar Animal que ataca directamente a la caza y, en particular, a ciertas modalidades tradicionales, como la caza con hurón y perros de madriguera.
En un comunicado de prensa, la Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha asegurado que ante esta ley el sector cinegético, el taurino y el mundo rural deben mantener una postura firme, puesto que el articulado de la misma contraviene claramente los intereses de todos estos colectivos.
El presidente de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, Agustín Rabadán, ha asegurado que cuanto menos es sorprendente que la tramitación de este documento se ha producido durante el mes de agosto, mes en el que prácticamente todo está paralizado
Este hecho, en su opinión, sólo puede entenderse como un claro signo de evitar que todos aquellos que tuvieran intereses en esta ley y, especialmente, a los que les afecte de manera negativa, como es el sector cinegético, no pudieran mostrar su rechazo a la misma.
Esta organización ha asegurado que del nuevo texto elaborado por el ejecutivo regional ha desaparecido la petición que sí recogía el segundo borrador referente a que deben excluirse del ámbito de aplicación de esta norma, los animales auxiliares del hombre cuando se utilicen en el ejercicio de la caza.
Este nuevo texto, ha dicho, entra en conflicto directo con el mundo rural y sus actividades asociadas, como son la caza y su gestión, la ganadería y los festejos taurinos, que para este caso concreto, podría suponer la prohibición de las escuelas taurinas y los tentaderos en campo.
Asimismo, han señalado que la ley también repercutirá negativamente en actividades como la hípica y el mundo del caballo.
Además, el nuevo texto pretende hacer desaparecer la actividad del adiestramiento de determinados animales, con el único y exclusivo fin de que no puedan utilizarse en acciones cinegéticas.
El nuevo texto también prohíbe expresamente al tiro de pichón y codorniz y no permite el control de aquellos animales de ámbito doméstico que, por cualquier razón hayan terminado en el medio rural, aun cuando se sabe que pueden suponer un grave problema para muchas especies silvestres.
La Federación de Caza de Castilla-La Mancha considera que el texto al estar dirigido y redactado por el sector animalista, no prohíbe el facilitar comida a los perros y gatos que sin propietario y control sanitario alguno, deambulan por los pueblos y ciudades, hecho que aparte de molestias de suciedad y olores que deben soportar los vecinos, también pueden suponer un serio riesgo de enfermedades transmisibles a las personas.
Hay que reseñar que estos animales, dada su facilidad de reproducción, más temprano que tarde, acaban extendiéndose al ámbito rural, causando un grave perjuicio, ha señalado la federación en su comunicado.
Para la Federación de Caza de Castilla-La Mancha este es un texto que en sus disposiciones sólo contiene vaguedades y ambigüedades sujetas a interpretación, dejando siempre la puerta abierta a la prohibición más extrema.
Finalmente, han indicado, que la ley convierte a los miembros de las asociaciones de defensa de los animales en colaboradores de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, aún cuando han dicho, “todos sabemos el odio notorio que estos grupos profesan hacia la caza, los toros o sus actividades afines por el hecho de que estas asociaciones provienen del ámbito urbano y nada entienden del mundo rural”.