Facha, pijo, machista, por José García Escorial - Cazawonke

Apenas eran la siete de la mañana, la cita con el guarda estaba confirmada a las 07.30, la jornada se presentaba espectacular de luminosidad después de las horribles jornadas de la DANA.

No conozco a ningún cazador americano que no sea votante de Trump

El paterfamilias, cazador, en el asiento del copiloto estaba ocupado con su teléfono móvil, y de repente gritó de alegría, madre e hija en los asientos traseros se abalanzaron para entrelazar las manos, y yo, dejando una mano libre del volante, choqué mi puño derecho. Había ganado Trump, las elecciones presidenciales de Estados Unidos 2024.

No conozco, ni he conocido en los últimos años, a ningún cazador americano que no sea votante de Trump.

Facha, pijo y machista (I)

Me voy a la sierra de Madrid, mi mujer de copiloto, dos amigas en el asiento de atrás, las llevo para que pasen el día en casa de una amiga común, y por decir algo, suelto: «Pues vaya con lo de Sánchez, su mujer, su mano derecha, la lluvia de Levante y ahora lo de Trump».

Y las dos de repente, como unos días antes las americanas, saltan y al unísono dicen es que es «un facha, un pijo y un machista. Me abstuve, sorprendido, de hacer comentario alguno.

Alguien, algunos, muchos, inventaron la triada de «facha, pijo y machista» con tan indudable éxito que dos señoras conservadoras en lo político (eso creía yo), lo sueltan de modo ofensivo, como si contestaran de modo autómata al Ave María del Santo Rosario.

Recibí una felicitación del Safari Club International por el triunfo electoral de Trump

Desconozco si Trump caza, me consta que sus hijos sí que lo hacen, así como que recibí una felicitación del Safari Club International por su triunfo electoral, porque nadie allí duda que durante el próximo mandato presidencial los cazadores de allí, la caza, y su conservación real y efectiva van a ser respetados y alentados.

También me consta que según palabras de Trump «el comunismo no tendrá cabida en los EEUU», y mucho me temo que España pague una gran factura de futuro por mantener un régimen con apoyo comunista, como se da en la actualidad.

Siento que los partidos conservadores no hayan hecho un eslogan contrario, aunque algún comunicador ya se autodefinió de modo orgulloso, categórico y meritorio de «rojo y maricón».

Con la victoria de Trump ha ganado, y mucho, la caza

Que en los próximos años nos vendrán a España más cazadores americanos no me cabe duda, y del mismo modo mantendrán activos todos los cazaderos abiertos del mundo, tampoco dudo de la subida de precios en nuestra actividad.

Con la victoria de Trump ha ganado, y mucho, la caza, aunque casi todas nuestras autoridades políticas ya se encargarán de fastidiarnos a su debido tiempo, y seguirán sin permitir el uso de silenciadores; dejarán que la sarna campe sin control eficaz alguno; intentarán mantener cerrada la caza del lobo; seguiremos con las 17 leyes de caza, muchas de ellas solo para una provincia y con normativas tan dispares que nadie entiende, como no poder utilizar los térmicos en unas autonomías y en otras sí, por ejemplo; o lo absurdo de pedir un permiso de armas para nacionales de países que simplemente no tienen por precepto legal ese documento, y nos vuelven locos tanto a la Guardia Civil, como a los profesionales y a los consulados de España en medio mundo.

Y, además, la pretendida guía electrónica con coordenadas de todas las piezas de caza da igual que de menor o mayor, se parece al deseo de dar por ley todos los datos de uno hasta los bancarios, por pernoctar en cualquier establecimiento turístico.

Y no hago distinciones de color político, todas las opciones gobernantes en la actualidad las encierro en el mismo cajón de despropósitos.

Cada vez seremos menos los cazadores españoles, encima mal vistos por la sociedad dominante, y, acaso nos lo merezcamos por haber aceptado desde hace tantos años tamaña manipulación.