Dentro del programa de actividades de la feria se realizó una prueba de aptitud de cachorros de perros de caza con conejo. La exhibición consistía en que se soltaba a un conejo en un recinto vallado, en el que, previamente, se habían colocado numerosas ramas en las que el animal se escondía. A continuación, el dueño introducía a su perro que buscaba con el ramaje hasta dar con su presa, y durante la prueba el perro mató a dos conejos.
Se solicitaba para el cazador una pena de nueve meses de prisión por cada uno de los delitos, así como inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo; durante el tiempo de la condena e inhabilitación especial por el tiempo de dos años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales.
El Juzgado ha absuelto al cazador por falta de concurrencia de todos y cada uno de los elementos del tipo penal, aunque la sentencia no es firme, y puede apelarse en diez días.
La defensa fue por el letrado jiennense José Luis Marín Hortelano, con amplia experiencia en procedimientos jurídicos relacionados con el ámbito cinegético.