El disparo de un cazador francés tomaba parte en una batida de jabalíes se coló accidentalmente en la cocina de una casa, tras romper la ventana del domicilio.
Una disparo de escopeta irrumpió de forma estrepitosa en la cocina de una casa en Finistère, la Fisterra francesa. El susto se lo llevó una familia de Plouigneau, una población ubicada cerca de Morlaix, en la punta noroeste del país. El periódico 20 Minutes informó sobre los detalles del suceso.
Un cazador de sesenta años que formaba parte de una partida que perseguía a un jabalí. Pero, por error, acabó disparándole a la ventana de uno de los domicilios de la zona. Nadie salió lesionado.
El autor del disparo estaba en un grupo con otras quince personas. Su disparo atravesó con estruendo el ventanal de una casa y acabó rebotando contra la pared de la cocina de la casa. En ese momento la gendarmería fue alertada de lo ocurrido. Los agentes sometieron al cazador a una prueba de alcohol en sangre, pero el test realizado dio un resultado negativo, según informan medios franceses.
En el país galo se están realizado batidas para limitar la población de jabalí. El pasado mes de diciembre los bomberos y la policía acabaron avisando a un cazador para que abatiera a uno de estos animales, que se paseaba por la zona de aparcamiento de un centro comercial ubicado en la población de Laon.
Fuente: lavozdegalicia.es
