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CRÓNICA DE BALLESTEROS
MONTEROS DEL HITO
El bar Carretera de la localidad de Portezuelo en Cáceres se convertía en sede el pasado sábado 14 de diciembre para Monteros del Hito, donde había dado cita Jesús Carrero a los valientes que se habían decidido a cazar la finca de Ballesteros.
Se adentraban los monteros en una zona de caza reflejada en innumerables ocasiones en grandes libros de caza, donde por norma general, el jabalí, siempre era denominador común y principal protagonista de los avatares literarios.
Con puntualidad británica realizó Jesús Carrero el sorteo de puestos y la ordenada partida de las armadas hacia las posturas, con cazadores ilusionados en una jornada que prometía ser de lo mas entretenida.
Día de abundante caza
Si me descuido no desayuno como se suele decir, entre el despiste y la posición más lejana de la mancha desde mi domicilio, llegué para cuando ya estaba todo preparado y mi nombre no tardaría en reflejarlo las bolas del bingo, siendo el 3 del cierre del Hornito la posición caprichosa que me iba a tocar defender en este día de abundante caza.
Frío, mucho frío hacía cuando bajamos del Land Rover para ocupar ese paso en los alambres de la finca lindera, no sin antes haber saludado como pude, a los habituales.
Desde la colocación de los primeros puestos se intuía que la mancha iba a ofrecer un buen día de caza, los innumerables rastros eran visibles por todas las armadas y algunas reses se dejaban ver delante de los vehículos mientras transitaban la finca. La cosa pintaba bien.
Movimiento antes de soltar y estrepitosas carreras cuando se soltó
Dos gamas abandonaban la zona por mi posición justo en ese momento, y dos jabalíes fueron vistos y no vistos por la espesura sin salirse, dado que inquietos por el transito de personas en el cazadero ya andaban de levante.
Algunos disparos se producían instantes antes de soltar, justo cuando las rehalas entraban al cazadero, pero no fue hasta unos minutos después de la apertura de portones, cuando comenzaron las estrepitosas carreras en una primera instancia tras las reses.
Y fue en ese momento cuando maese raposo hizo aparición en mi postura, costándome dos disparos para quedarme con él, y es que hay que ver, a veces, lo duros que son.
Así, los disparos no tardaron en aparecer y alertar a todas las posturas de que la fiesta había comenzado y era necesario estar atentos.
Un no parar en los primeros instantes
Fue un no parar sobre todo en los primeros instantes en los que cierres y traviesas azotaban rifles al paso de las rehalas que fueron cazando la mancha como Dios manda, con una mano épica y un trabajo intachable, empujando venados, gamos y, como no, los escurridizos guarros que eran los que mas juego daban a los canes, no obstante, las rehalas asistentes eran doctoradas en el escurridizo jabalí y fueron sacándolos sin piedad para el deleite de los allí presentes.
Altibajos mediada la montería
Jornada con altibajos, sobre todo pasada la mitad de la cacería, en la que los lances fueron sucediéndose alternos, bonita donde las haya dado que no había tiempo para el descanso, cuando terminaba una ladra, comenzaba otra, y así sucesivamente.
Con la montería ya agonizando, una ladra lejana se acercaba a mi postura, a la que hizo irrupción una cierva herida que fue apresada finalmente por los perros, y a la que dimos digno final.
Caras de satisfacción
Tras la retirada de los monteros a la comida comenzó el trabajo de la organización para formar el precioso plantel.
En la comida todo eran caras de satisfacción, mi armada, el 4 fallaba un jabalí, un servidor y el 2 cobramos dos ciervas, el 1 cobró un gamo.
En la armada de justo delante el amigo JF Cambero se convertía en el afortunado de la jornada, cobrando dos magníficos jabalíes con tremendas bocas.
La amiga María se hacía con un venado habiendo jugado lance a once jabalíes.
Monteros con tres y cuatro lances, prácticamente todos, los allí presentes, tuvimos nuestro lance particular o al menos la oportunidad de haberlo jugado.
Magnífico día de caza con Monteros del Hito
El plantel no llegó a conformarse completamente, dado que los carniceros comenzaron su trabajo, porque realmente a este grupo el día les había cundido, cobrando finalmente treinta jabalíes, con cinco navajeros entre ellos, diez venados, con un par de ellos destacables, y dos gamos que completaban la guinda al pastel de un magnífico día de caza con Monteros del Hito.
Con esta buena jornada cerraba el 2024 Monteros del Hito, sumando para una temporada en la que con pies de plomo sigue avanzando Jesús Carrero despidiéndose de sus habituales deseándoles unas «¡felices fiestas!».
Crónica y fotografías de Carlos Casilda Sánchez
DATOS DE LA MONTERÍA
Organización: Monteros del Hito
Fecha: 14 de diciembre de 2024
Finca: Ballesteros / Finca abierta
Hectáreas monteadas: 800
Localidad: Portezuelo, Cáceres
Puestos: 42 / Sin cupo / Rehalas: 18
Venados: 10
Jabalíes: 30 (5 navajeros grandes)
Gamos: 2
