Medio Ambiente entiende la preocupación de los cazadores y asegura que de no haberse tramitado de esta forma se corría el riesgo de perder la temporada de caza en Andalucía.
La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio ha aprobado la nueva orden en la que se recogen las vedas y períodos hábiles de caza y en la que se dan a conocer las novedades para la temporada 2017/2018 en Andalucía. Y lo ha hecho tras estudiar pormenorizadamente todos los aspectos jurídicos y técnicos con el fin de dotar al reglamento de todas las garantías jurídicas; de lo contrario, se hubiese corrido el riesgo de perder la temporada cinegética.
La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio entiende la preocupación de algunos sectores relacionados con la caza por el posible retraso en la aprobación de la orden, pero insiste en que lo justifica la necesidad de darle plena garantía legal a la actividad cinegética para que se desarrolle con normalidad, sin contratiempos y evitar que cualquier alegación pudiera paralizarla.
La Junta agota el plazo para publicar la orden general de vedas para dar la máxima garantía jurídica a la actividad cinegética
Los servicios jurídicos de la Consejería han trabajado para reforzar el decreto haciéndolo más sólido jurídicamente; ya que de lo contrario, cualquier recurso amparado en la Ley de Biodiversidad y su relación con especies exóticas podría paralizar la temporada de caza.
Hace escasamente una semana, el Consejo de Gobierno aprobó el Reglamento
de Ordenación de la Caza, un decreto muy demandado por el sector y en el que la Consejería ha concentrado muchos esfuerzos desde hace años para conseguir este resultado; un documento, técnicamente completo, jurídicamente sólido y socialmente consensuado con el sector.
En este sentido, el esfuerzo y la dedicación que la Conserjería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio está dedicando al sector de la caza es indiscutible, ya que dos normas de esta envergadura ponen de manifiesto la conexión directa con los intereses de los cazadores andaluces.
La nueva norma de veda todavía se tiene que publicar en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA)
La nueva norma de veda, pendiente de su publicación en BOJA, modifica la del 5 de junio de 2015, y en ella se incluyen las medidas acordadas en el último Comité de Caza, que tienen como objetivo favorecer una actividad cinegética respetuosa, ordenada y sostenible en todo el territorio andaluz.
Cambios en la nueva orden de vedas 2017/2018
Entre los cambios registrados este año sobresale la modificación del período hábil para la caza de zorzales y estornino pinto, retrasando tanto el inicio como el final de su periodo al 12 de noviembre y 4 de febrero, para adaptarlo al estudio denominado ‘Fenología migratoria del zorzal común. Levantamiento de información con referencia geográfica en Andalucía para su conservación como patrimonio natural». Igualmente se procede para la zona costera de Cádiz, que se desplaza el inicio del periodo hábil al 15 de octubre y el final al 4 de febrero.
Respecto a la modalidad de perdiz roja con reclamo se ha aprobado que los cotos de caza de la provincia de Málaga, adscritos a las áreas cinegéticas de Tejeda-Almijara y Ronda-Grazalema, puedan optar entre el periodo hábil de caza de su grupo de zonas cinegéticas y el correspondiente al de fechas más tempranas, al tratarse de una medida de conservación respecto al periodo de reproducción de la especie, tal y como recomienda la Comisión Europea.
En relación con la caza de la tórtola común se reduce el cupo de captura de los mismos y se excluye la tórtola del periodo general de caza, es decir, del 8 de octubre al 31 de diciembre, con el fin de favorecer el estado de sus poblaciones. Cabe destacar que entre las causas que han provocado el declive de las poblaciones de tórtola común en todo el territorio nacional y europeo se encuentran la destrucción y alteración de su hábitat de cría, la intensificación agrícola en zonas productivas, el empleo masivo de fitosanitarios, desaparición de linderos arbolados y bosques de rivera, la caza abusiva o las prácticas ilegales.
Órgano de participación
El Comité Andaluz de Caza, en el que están representados todos los sectores económicos y sociales que participan de algún modo en el desarrollo de las actividades cinegéticas, colabora en los cambios que se producen en la orden general de vedas y en la que se recoge la mayoría de las propuestas realizadas por el sector. De esta manera se pretende garantizar, con una oferta atractiva, el ejercicio de la caza de manera sostenible además de consolidarlo como un medio de desarrollo socioeconómico en los núcleos rurales.