La responsable de una protectora de Tarragona es llevada a los tribunales acusada de apropiación indebida, falsedad documental y otros cargos por la Asociación de Rehalas Regionales Caza y Libertad (ARRECAL), tras apropiarse del perro de un rehalero.
Los hechos sucedieron a la finalización de una batida. Uno de los perros, en cuyo cuello llevaba un GPS, fue montado en un coche. El collar GPS le fue arrancado y lanzado a la cuneta de una carretera.
El rehalero –socio de Arrecal de Tarragona– denunció la desaparición del animal, de raza podenco. Poco tiempo después descubrió que una protectora de animales de Tarragona, incluía fotos de su perro solicitando a los ciudadanos su «adopción», todo ello, por supuesto, sin su consentimiento ni conocimiento.
Ante el estupor del propietario, se solicitó a la «protectora» la devolución del animal, negándose las personas responsables del centro con la excusa de que se encontraba en malas condiciones. Como consecuencia de todo ello, el rehalero sufrió una inspección en sus instalaciones, en la que se confirmó que las mismas cumplían todos los requisitos y que los animales estaban en perfecto estado.
El rehalero denunció a la protectora de Tarragona y, como represalia, la protectora le denunció a su vez por un supuesto maltrato animal.
Tras recibir la solicitud del rehalero, Arrecal decidió prestar auxilio a su socio a través de su asesoría jurídica y veterinaria. Así, a través de Arrecal se ha presentado una denuncia contra la responsable de la protectora por un posible delito de apropiación indebida, falsedad documental y otros cargos.
El caso ha llegado a la Audiencia Provincial de Tarragona
Tras un tortuoso y lento proceso, el hecho ha llegado a la Audiencia Provincial de Tarragona, donde los magistrados tendrán que decidir sobre la acusación que se ha formulado contra las personas responsables de la protectora.
El resultado del procedimiento en cuestión es, como el del cualquier asunto judicial, incierto, pero desde ARRECAL se quiere destacar la necesidad de denunciar y combatir este tipo de actuaciones ilícitas y que algunos casos pudieran ser claramente delictivas.
Por desgracia, este tipo de incidentes se ha vuelto cada vez más frecuentes a pesar de resultar un claro ataque a una actividad legítima: la caza con perros.
ARRECAL aprovecha para informar que ante este tipo de actuaciones sus socios cuentan con el apoyo de la entidad, que pone a su disposición asesoramiento jurídico y técnico especializado. Además, ha dado instrucciones a sus servicios jurídicos para actuar y poner en conocimiento de la Fiscalía cualquier hecho de esta naturaleza que suponga la ilícita desposesión de perros a sus socios.
