Arriesgar, la base del éxito; por José García Escorial

Arriesgar Escorial — Arriesgar, la base del éxito…
La caza por definición es asumir riesgos en todos lo sentidos, incluso en el resultado.

Si Cristóbal Colón hubiera tenido miedo al fracaso absoluto, no se hubiera embarcado en Palos de Moguer él 3 de agosto de 1492, y no habría abierto la ruta a lo que luego fue América.

«Audentes fortuna iuvat», la diosa Fortuna se pone a favor de los audaces, traducción no literal de la máxima latina, pero de fácil comprensión.

El famoso 6X6X60 de elefantes era una osadía.

Arriesgar

La caza por definición es asumir riesgos en todos lo sentidos, incluso en el resultado. Qué pocas veces volvimos de noche, al acabar la jornada, plenamente satisfechos, siempre falta algo, o sobran cosas que no tenían que haber sucedido.

La primera vez que se cazó un paquete de caza con nosotros, estaba yo allí con un grupo de amigos, no de clientes, de amigos de verdad en aquellos tiempos, y el primer día cuando llegaron los dos últimos de cazar me dijeron: «Ya sabíamos que era una prueba, y ha salido mal, mejor es que nos volvamos mañana mismo, si es posible, a España».

No habían visto ni rabo, y mientras me contaban sus desventuras nos acercábamos a la casa de los muertos, el skinning shed, que estaba repleto de animales cazados por el resto de amigos. Se quedaron de piedra, y les afirmé que donde habían salido tantos trofeos, ellos irían al siguiente día.

Muchos miles de paquetes de caza, para muchos miles de cazadores

A lo largo de los años hemos realizado muchos miles de paquetes de caza, para muchos miles de cazadores, y eso que la competencia afirmaba que vendíamos duros a pesetas. No era verdad, la realidad es que ellos hasta nuestra llegada vendían pesetas a dos duros, y les duró muy poco, el mercado les impuso un castigo muy duro al eliminarlos.

¿Fácil? Arriesgar

El desarrollar el famoso 6X6X60 de elefantes era una osadía, que cumplimos sobradamente mientras estuvieron abiertas las concesiones puras del delta del Okavango. Parecía fácil pero nadie ni siquiera lo intentó el cazar con seis cazadores seis elefantes por encima de 60 libras.

Fácil se consideraba hacer la Operación Oso, y no era cierto, era muy complicado, y en un solo grupo llegamos a realizarla con 32 cazadores, de cinco nacionalidades distintas, más guías españoles, y fue una auténtica osadía, pero funcionó. Salieron varios imitadores, la mayoría habían cazado con nosotros, pero fueron flor de un día, acaso el problema era lo que me dijo mi añorado hijo: «en nuestros osos se trabajaba mucho».

Lo de subir al Pamir para cazar el argali de Marco Polo en 19 ocasiones, quizás habría que registrarlo en el Libro Guinness de los récords, igual que lo de los 33 años de búfalos en Tanzania, las escuelas de caza, la Polonesa de corzos, todo parece fácil, pero hay que hacerlo y saber hacerlo, y que los demás lo aprecien.

Riesgo Arriesgar

El enterrar en nuestro pabellón un montón de recursos, o el levantar Paoland, solo conjuga una palabra: riesgo.

El haber escrito miles de artículos, y seguir haciéndolo para inculcar un magisterio, una enseñanza objetiva, sobre la caza y su mundo es parte de ese riesgo. Que es la misma palabra que todos los cazadores tienen en mente cuando inician una jornada o un viaje de caza.

Pabellón de Safari Headlands en el corazón de Madrid.

Me sigue emocionando descubrir un nuevo destino de caza, probarlo, diseñarlo y ponerlo en el mercado, me hace sentir muy vivo

Me sigue emocionando descubrir un nuevo destino de caza, probarlo, diseñarlo y ponerlo en el mercado, me hace sentir muy vivo, y no me paro a pensar que está muy lejos, que pierdo tiempo y dinero si no me gusta.

«Alea jacta est», no hay vuelta de hoja, «eres un consultor de caza, un creador de ilusiones reales, sigue arriesgando», me digo a mí mismo.