El antílope jeroglífico o antílope harnaché o guib, nombre que recibe en los países francófonos, es uno de esos animales que no dejan indiferente a ningún cazador. Tanto si estás iniciándote en la caza africana como si llevas ya varios safaris a tus espaldas, este curioso y delicado antílope representa uno de los iconos africanos por excelencia.
Su nombre anglosajón, bushbuck, es descriptivo del lugar donde suele habitar este ungulado de talla mediana. Y es que el denso bosque y matorral representan para él el lugar idóneo donde poder alimentarse y refugiarse pasando totalmente desapercibido. Este comportamiento, junto con su hábito de estar solos o en pareja, es lo que hace que, en cierta manera, su caza se parezca a la del corzo…
PODRÁN LEER EL REPORTAJE COMPLETO EN LA REVISTA CAZA Y SAFARIS DEL MES DE ABRIL DE 2015, QUE YA ESTÁ DISPONIBLE EN SU PUNTO DE VENTA HABITUAL.