El pasado fin de semana (3 y 4 de febrero de 2024) se celebraron las VIII jornadas de caza de corzas de Guadalajara en el entorno de Sigüenza, siendo su resultado un nuevo éxito en la gestión de poblaciones.
Las jornadas discurrieron con una climatología alejada de los rigores invernales, si bien es cierto que por la mañana había heladas y puntualmente en algunas zonas algo de niebla, el mediodía y la tarde se desarrollaron bajo un sol que en algunos casos era excesivo para las fechas del año en la que nos encontramos.
Se podría decir que un gran número de acotados han conseguido el efecto deseado
En la junta de carnes del domingo se reunieron 43 corzas, número menor que en otras ocasiones y resultado de años de una adecuada gestión en busca del equilibrio en la relación de sexos.
La tónica general durante la caza fue la de una sensación de existir un menor número de hembras en relación con años anteriores, pero una paridad en cuanto a la relación de sexos, por lo que se podría decir que un gran número de acotados han conseguido el efecto deseado y anhelado desde hace años.
Estas jornadas además han servido para aportar muestras en dos importantes estudios
Como viene siendo tradicional, estas jornadas además han servido para aportar muestras en dos importantes estudios:
La tesis doctoral sobre Cepehenemyia stimulator de Néstor Martínez del INVESAGA, que se llevó 39 cabezas de corzas para analizar las miasis en las vías respiratorias.
El convenio con el INIA-CSIC para el estudio sobre la reproducción del corzo y la diapausa embrionaria, donde se tomaron distintas muestras del aparato reproductor de las corzas, principalmente óvulos para hacer estudios de fecundación in vitro.
Hermandad
Pero si en algo destacaron las jornadas fue en la hermandad entre distintos acotados de la zona de Sigüenza y Atienza en busca de una gestión de poblaciones acorde a las necesidades de la especie.
Esto mismo se materializó en la tradicional comida de confraternización de los participantes.
Exquisita experiencia gastronómica en La Cabaña
La experiencia gastronómica que nos brindó el restaurante La Cabaña estuvo a la altura de los mejores restaurantes especializados en platos de especies cinegéticas, con un menú basado en unos entrantes, como no podía ser de otra manera, en carne de corza (steak tartar, croquetas, pimientos del piquillo rellenos, canelones gratinados, lomo a la plancha con chalotas reducidas al vino tinto y judías estofadas), más un segundo y postre que hicieron las delicias de los 43 comensales.
Es por esto mismo que, lejos de valorar el número de animales reunidos el domingo, podemos decir que las jornadas han sido un verdadero éxito.
Agradecimiento de corzas de
Desde aquí agradecer públicamente el esfuerzo y dedicación de todos los participantes en las jornadas, en especial a Alberto y Conchi del hotel restaurante La Cabaña, por poner sus instalaciones a nuestra disposición, a Sandra la veterinaria por su buena disposición, a Néstor del INVESAGA por su implicación con Cephenemyia, a Bea, Sánchez y el resto del personal del INIA por su esfuerzo, a la sociedad de caza Segontia por implicarse en una caza de gestión sostenible, a Javier Iñurrieta por ayudar en la toma de muestras, a Cárnicas Valmorisco y a Óscar Barajas y Gonzalo Varas la organización y coordinación de las mismas.
