Montería Perros Pluma invitada

Gracias a los buenos aficionados, por Alfonso Aguado

Gracias a rehalas
«Gracias a los buenos aficionados».

Me refiero a los buenos monteros, guardas y organizadores, no como aquellos que solo piensan en  abatir más y mejores trofeos, sino a los que, por su conocimiento y educación montera, saben que la montería es un conjunto de asociaciones, entre las cuales, el día de la montería toma especial importancia la, tan ancestral, del perro con el hombre.

Sin perros no hay caza y sin rehalas no hay montería

Diez mil años llevamos cazando con nuestros perros y por eso sabemos que, de su rendimiento depende, en gran medida, el éxito o el fracaso de una jornada de caza. Si el perro no está en forma o las condiciones del terreno no son las propicias, no podemos exigirles un nivel de trabajo. Gran verdad es que, sin perros no hay caza y sin rehalas no hay montería. De su preparación previa a la temporada, me consta que se han venido dedicando con abnegación los rehaleros, antes de la apertura del periodo hábil. Pero no es suficiente.

En cuanto a las condiciones del terreno, además de los rehaleros, cada vez es más frecuente que organizadores, guardas e incluso monteros, coloquen puntos de agua, en los momentos previos a la suelta para favorecer la necesaria hidratación de los perros. No hay mejor solución cuando la climatología todavía nos tiene mirando al cielo a la espera de las ansiadas lluvias otoñales.

Gracias a rehalas

Gracias a todos los buenos aficionados que montan una garrafa de agua y un cubo, al salir de montería

A todos estos buenos aficionados que, junto con sus achiperres, como los llama el maestro Aguayo, montan una garrafa de agua y un cubo, al salir de montería, para colocarlo en una sombra junto a su vehículo, nuestro agradecimiento, en nombre de todos los rehaleros. Su mejor trofeo, ese día, será encontrarse con que le falta agua a ese cubo cuando termine la jornada. Sabio y prudente será el organizador que, estos primeros días de temporada, no se juegue el trabajo de todo un año a que, por culpa de la falta de puntos de agua naturales, el bajo rendimiento de los perros pueda contribuir a un resultado cinegético peor de lo esperado. Adelantar con los postores una serie de garrafas y cubos de agua para colocarlos en puntos estratégicos de la mancha al colocar las armadas, será su mejor inversión el día de la montería.

Detalles como éstos diferencian a los buenos aficionados. Gracias.

Gracias a Por Alfonso Aguado Puig

Presidente de la Asociación Española de Rehalas

Gracias a

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