El pasado 25 de noviembre nuestro amigo Juan Carlos Guillén cobró un guarro con unas defensas descomunales en abierto, él mismo nos relata el lance al día siguiente de cazar tan magnífico jabalí.
¡El sueño de todo montero!
“Ayer pude cumplir el sueño de todo montero
Eran las 13 horas cuando el latido de un podenco puntero en el viso del testero de enfrente nos puso en alerta, acto seguido pudimos ver que la ladra venía en nuestra dirección y con un guarro delante.
Era el momento de echarse el rifle a la cara para intentar cortarle la carrera en el mínimo hueco que pudiera verlo, y así fue, en un clarito de tres metros pude meterlo en el visor y conforme apreté el gatillo, echó el guarro a rodar con un tiro de codillo, mientras escuchaba decir a mi amigo Emilio por detrás: “¡vaya boca tiene el guarro!”.
La fiesta de haber culminado el lance con éxito nos duró a penas 10 segundos, puesto que el animal se recompuso y echó a correr de nuevo teniendo que rematarlo de otros dos tiros más y es que, “¡qué duros son!“.
¡Con 8,2 cm y 10,2 cm de navajas por fuera!
La alegría que me entró al ver ese guarro ¡con 8,2 cm y 10,2 cm de navajas por fuera! se la pueden imaginar ustedes, pero lo que bien se es que podré matar guarros más grandes, aunque en abierto y como este pocos, por no decir ninguno.
La anchura de ambos colmillos, por fuera, es de 2,3 centímetros.