Panorama montero

Monteando bajo el diluvio: soberbia Malueñez de Arriba con Pelillo SC

con Pelillo montería
Monteando bajo el diluvio: soberbia Malueñez de Arriba con Pelillo Servicios Cinegéticos.

con Pelillo montería
‘Monteando bajo el diluvio: soberbia Malueñez de Arriba con Pelillo Servicios Cinegéticos’ también en redes sociales.

Majadavieja con Riquelme

CRÓNICA DE MALUEÑEZ DE ARRIBA (LLANAS)

PELILLO SERVICIOS CINEGÉTICOS

Majadavieja con Riquelme

La previsión decía que entre las 10:00 y las 12:00 comenzaría a llover con fuerza… a las 11:00 comenzó a jarrear.

Al alba se colocó la armada de la Garganta, lindera con la mancha de la Sierra, también de Malueñez de Arriba, pero que ya es preparque (del Parque Nacional de Monfragüe).

El resto de las armadas, por la citada previsión, también adelantaron su salida.

¡Antes de las 9:00 ya estaba toda la mancha cerrada!

Así de atípicas son las Llanas de Malueñez de Arriba.

Últimas indicaciones de Javier y Jorge, máximos responsables de Pelillo Servicios Cinegéticos.

A quien madruga, Dios le ayuda

Mientras los monteros voluntarios iban ocupando los distintos puestos de la Garganta, Javier Rodríguez y su compadre Jorge Cardador, máximos responsables de Pelillo Servicios Cinegéticos, habían citado al resto de monteros a las 7:30 en Jaraicejo.

Un café rápido y dar sus puestos a quienes no pudieron asistir la noche anterior al sorteo que se celebró en el Hotel Las Cigüeñas (@Hotel Las Cigueñas) de Trujillo.

Dadas las características de la mancha y las previsiones meteorológicas, es obvio decir que el sorteo hay que hacerlo la noche anterior y que es inviable dar migas, la venganza vino de la mano de la exquisita comida del Catering Cáceres Pajuelo (www.cateringcacerespajuelo.com).

Como estaba pernoctando muy cerca de Jaraicejo, en uno de uno de mis establecimientos favoritos cuando viajo a mi querida Extremadura, el Portugal II (@Hostal Restaurante Portugal II), me presenté en el punto de encuentro mucho antes de las 7:30.

Poco tardé en hilar la hebra con Higinio Ávila y con su sobrino Carlos Sánchez, que habían llegado antes que yo.

Tuvieron premio, a quien madruga, Dios le ayuda, completaron el cupo de cuatro venados, uno lo abatió Carlos (¡su primer venado!) en un momento que su tío le pasó el rifle, además Higinio cobró un gamo y una cierva, sin embargo, lamentó no poder cobrar un cochino enorme, que iba muy pegado pero que fue imposible pistear por la cantidad de agua que caía al finalizar la montería.

Cuando comenzó a jarrear ya tenían la montería ‘hecha’.

VALIENTES

Pero el celebre refrán no había que aplicárselo sólo esa mañana del pasado 15 de noviembre a Higinio y a Carlos.

Era valido para prácticamente todos: organización, propiedad, guardería, monteros y acompañantes, rehaleros, guías, postores, cargueros, arrieros, ayudantes… hasta este cronista había madrugado, para todos los que participamos de una manera u otra en estas Llanas de Malueñez de Arriba.

Madrugadores y VALIENTES, se preveía que aquello iba a ser el diluvio, y no digo yo que no se viera en un momento dado en lontananza el Arca.

Llegaron Miguel Recio y Tomás Zabala, para la ocasión rehaleros, pero luego ayudan a todo lo que sea menester, son de la familia Pelillo y aquí no se le caen los anillos a nadie.

Después lo hizo Raúl Pascual acompañado de su hija Lucía y del sobrino de Javier, Guillermo Torrecilla, me invitó al café sin conocerme de nada por el mero hecho de estar con Miguel y Tomás, son esos pequeños detalles que cuentan y que definen a una persona.

Raúl también tuvo su merecido premio, tres venados de muy buenas hechuras y dos cochinos antes de que comenzara el vendaval.

Jorge ya había repartido por entonces todos sus puestos a los ausentes en el sorteo.

Camino de Malueñez de Arriba.

Las Llanas de Malueñez de Arriba

Trayecto corto, apenas 20 minutos, a pesar de lo embarrado que estaba el camino en algunos tramos.

Malueñez de Arriba linda, por ejemplo, con la mítica Valero o con El Coto.

Estas Llanas, lo son como tal en una parte de la mancha, con esos puestos dificilísimos en plena dehesa, pero también tiene monte y ladera, con posturas con unos testeros preciosos.

El escape natural de la caza es por la armada de la Garganta, hacia la otra parte de la propia finca, hacia la Sierra.

Armada situada en la garganta del Cubo que tributa aguas al mismo padre Tajo a través del embalse de Torrejón-Tajo.

Jorge, Álvaro, Javier, Lolo y Jacobo inmensamente satisfechos por el resultado, no es para menos.

El formidable ‘trío de gestión’

La gran ventaja de Malueñez de Arriba es su ‘trío de gestión’:

Una propiedad muy concienciada y que pone todo de su parte para mantener un medio privilegiado intacto, Álvaro Sánchez-Arévalo se preocupa y mucho por conservar Malueñez de Arriba en ese estado natural excepcional, además cuenta con la suerte que su familia le apoya en todo y que sus hijos Álvaro y Jacobo siguen sus pasos.

Otro punto esencial es la guardería.

José Manuel ‘Lolo’ Rubio, un guarda mayor de reconocido prestigio, que además cuenta con un equipo familiar muy dispuesto y capaz, su mujer Marisol García y su hijo Aitor.

Y qué decir de la organización.

En lo personal no he escondido nunca mi empatía con la gente de Pelillo Servicios Cinegéticos, con Jorge, con Javier y su familia, don Antonio Rodríguez Pelillo, que lo que más le puede gustar son sus perros y disfruta como un niño chico cazando con sus Rehalas Pelillo, y la matriarca, doña Mari Luz Torrecilla.

Pero de poco sirve lo personal si profesionalmente se falla, pero no es el caso, Jorge y Javier, a pesar de su juventud, tienen sobrada experiencia, y conocen a la perfección todos los palos de la caza, de la montería.

Es una garantía que el organizador haya sido cura antes que fraile, ya que andamos de refranes.

con Pelillo montería
Sobre estas líneas, Álvaro Sánchez-Arévalo y Javier Rodríguez recogiendo la Caracola de Oro de la temporada 2023-2024.
Abajo, Jorge Cardador y Jacobo Sánchez-Arévalo con la Caracola de Bronce de la pasada temporada.

Malueñez de Arriba en los galardones monteros

Todo lo anterior se refrenda en los premios monteros recibidos por estas Llanas de Malueñez de Arriba.

Sólo en las últimas campañas.

La temporada pasada Caracola de Bronce y la 2023-2024 Caracola de Oro de Caza y Safaris – Caza Wonke y de Guía de Monterías a la mejor montería en abierto.

También en la 2023-2024 se llevó Podenquero de Oro de Todomontería a la mejor montería de venados en abierto.

Por cierto, un inesperado asunto personal hizo que no pudiera saludar a mi querido amigo Emilio Jiménez, que tuvo que regresar a su Sevilla natal la noche anterior desde Trujillo. Un abrazo fortísimo y mucho ánimo, amigo.

La Peña Los Zahones, a la que pertenece, tiene un excelente gusto montero, y tienen reservados varios puestos en Malueñez de Arriba desde hace varías temporadas.

Inciso, conseguir un puesto en esta montería es harto difícil, pero que muy difícil.

con Pelillo montería

Últimas indicaciones

Estaba muy encapotado y oscurísimo, parecía como si las nubes fueran a reventar en cualquier momento.

A las 8:30 Javier y Jorge daban las últimas indicaciones a los monteros que ocuparían puesto en las armadas de Río Corcho, el Cobertizo y las Llanas.

La Garganta ya estaba cerrada.

De nuevo hincapié en la seguridad:

–Nadie se puede mover de donde está señalizado el puesto. No se puede doblar…

Javier hizo una recomendación sobre el cupo:

–Tirad los primeros cuatro venados que os entren, no esperéis medallas, esta es una montería divertida. Al final del día habrá alguien que habrá cazado el venado más pequeño y alguien que habrá cazado el más grande.

El cupo se estableció en cuatro venados, algunos puestos podían tirar una cierva, mientras que jabalíes, gamos y gamas no tendrían cupo.

Lolo, Marisol y Jacinto poco antes de comenzar a jarrear.

Tiroteo previo al diluvio

No eran las 9:00 aún y ya estaban los 37 monteros ubicados en sus posturas. Algunos de los cuales ya habían hecho gasto de pólvora, y no poco.

Ahora sí hubo que hacer uso de las eslingas para desatascar los vehículos de las rehalas.

Montearían 15 recovas escogidas, en Pelillo saben mucho de eso, en tres sueltas diferentes.

La principal suelta en contra del escape, de la querencia hacia la Garganta. Tras la cual soltarían dos rehalas de refuerzo, con la idea además de apretar a los cochinos.

Montearían a ida y vuelta.

Javier camino de la suelta, acompañado por su amigo y avezado montero, Ignacio Dueñas, que quería ver y disfrutar de tan peculiar batida desde dentro, me dejó con Jacinto, hermano de Lolo.

Jacinto había puesto los primeros pasos de Río Corcho (del 1 al 5), y se encontraba en la cercanía de una charca dentro de una amplia explanada.

Suelta de Rehalas Pelillo. Vídeo: Javier Rodríguez / Pelillo SC

Al soltar a las 9:30 se formó la mundial, ¡eso sí que era un guirigay!

No por conocida, la sinfonía montera deja de ser celestial: ¡ladras, carreras y tiros, varios puestos en distintos puntos de la mancha disparando a la vez!

Aquello hervía de cervuno, venados, ciervas, varetos, gabatonas, gabatos…

También se dejaron ver algunos cochinos en la parte más cerrada de la explanada.

De hecho, Jacinto tuvo que acudir presto a rematar un primalón que habían agarrado los perros.

Fotografía: Javier Rodríguez / Pelillo Servicios Cinegéticos

Y tras el guirigay, el temporal

La oscura borrasca ya no aguantó más, como a las 11:00 comenzó a llover, eran aguaceros continuos con arrebatos de temporal.

Se continuó tirando, aunque cada vez, lógicamente, con menor intensidad, la montería casi había terminado cuando otras comienzan.

Aguantaban estoicamente los rehaleros, los guías, los monteros y sus acompañantes… mientras que postores, ayudantes, arrieros o cargueros esperaban su turno… ¡quién dijo miedo!

VALIENTES.

con Pelillo montería con Pelillo montería

¡No se cobró ni una gama! Un misterio por resolver

Las manos de vuelta fueron mucho más rápidas que las de ida.

En pleno vendaval aún se escuchaba algún rifle tronar.

También hay que tener en cuenta que prácticamente sólo se tiraban machos y cochinos. Y aunque el cupo de venados era amplio, se iban completando.

Ciervas sólo podían tirar algunos puestos y una, mientras que las gamas, que se habían puesto sin cupo ante los enormes grupos que se ven, ¡no se cobró ni una y casi ni se vieron! Un enorme misterio sin resolver.

Los gamos dieron algo más la cara, pero muy poca cosa para la presencia de la especie en las Llanas.

Los cochinos, por su parte, aprovecharon la cantidad de cervuno que salió cuando la climatología era más favorable, y la premura de las manos en la vuelta ante la que estaba cayendo.

En un día normal, se hubieran doblado los abates sin mayor problema.

Javier, Jorge e Ignacio, empapados pero enormemente satisfechos.

Recogida a la heroica

Por nuestra posición estratégica, pasaron ida y vuelta Javier, Ignacio, Tomás, Jorge, Lolo, Marisol…

Iban secos y e ilusionados y volvían empapados y muy satisfechos.

Jacinto Rubio y el cronista, por aquel entonces, ya éramos más que colegas. Cuando arreciaba la lluvia nos metíamos en su vehículo. Aunque tuvimos que salir a por una cierva que cogieron los perros, y a pesar de los impermeables nos calamos hasta los huesos, nada como lo que le esperaba a Jacinto para recoger lo cazado en su armada y en otras.

Fue imposible negarse, y compartió su generoso y rico almuerzo conmigo.

Supe de un hombre que tuvo con un socio durante 20 años ¡cinco rehalas!, su pasión, aunque las tuvo que dejar por un infortunado accidente.

De un hombre que, asentado en Madrid con un buen sueldo, lo dejó todo y regresó a su Jaraicejo natal y desde entonces es feliz con sus ovejas y sus vacas.

Antes de las 13:00, sonando ya las caracolas, se despidió de mí y marchó a recoger a los monteros de su armada y después lo que éstos habían cazado.

Algunos rehaleros, que se habían quedado sin perros nada más soltar, localizaban a los que les faltaban con el GPS o, si no lo tuvieran, los llamaban con voces características y/o a toques de caracola.

A esa misma hora y diluviando, los equipos se pusieron en marcha para cobrar la caza y llevarla hasta la junta de carnes.

Heroica recogida que se alargó hasta las 18:30.

Fotografía: Miguel Recio / Pelillo Servicios Cinegéticos

Qué razón tenían Javier y Jorge cuando se negaron a suspender

Estábamos calados, paro calados de un agua limpia y pura, oro líquido para la tierra.

Qué razón tenían Javier y Jorge cuando se negaron a suspender ante la irrupción de la potente y meona borrasca:

–Hay más venados que nunca en Malueñez de Arriba, además hasta media mañana no dan lluvia.

Menos mal que en el recinto preparado que tiene la finca para la exposición del plantel, hay una zona techada donde guarecerse, aunque eso a quienes estaban trabajando en el campo de poco les servía.

Mejor para ellos fueron los ratos que ya avanzada la tarde la borrasca descansó y cesó de llover.

Además de las dificultades por la climatología tan adversa, es que muchos puestos habían completado el cupo o habían cobrado tres venados. Más los cochinos, los gamos, las ciervas, lo marcado por los rehaleros…

Poco a poco iba llegando la caza.

Hay que destacar entre los primeros venados que llegaron, uno de preciosas y curiosísimas cuernas. Muy corto, cuernas negras y recias, y 15 puntas en tan escaso metraje.

Casi al final, de la Garganta, llegó un precioso y gran vedado de 16 puntas, quizá algo corto, por ponerle un pero, aunque muy grueso, simétrico, de cuernas negras… bronce sin duda.

El precioso venado de 15 puntas en escaso metraje.

Un soberbio plantel: 112 venados, 112 venados en abierto para 37 puestos…

Tras muchas horas y mucho esfuerzo a las 18:30 se podía lucir un soberbio plantel: 112 venados, 112 venados en abierto para 37 puestos; 19 jabalíes; cinco gamos; y 20 ciervas de gestión.

Además de los ya nombrados, había 25 venados que se pueden considerar como muy buenos de montería.

Entre los cochinos, tres navajeretes.

con Pelillo montería

La presentación se cuidó al máximo, rodeando el plantel con poda.

Se organizó un barrizal tremendo en la parte baja del cemento, lógico con tanta lluvia y trajín.

Algunos vehículos, sobre todo con remolque, las pasaron canutas para salir de esa zona, otra vez las eslingas, voluntarios empujando o la maestría al volante hicieron que todos pudieran seguir su camino.

El camión de Cárnicas Dibe (www.carnicasdibe.com) hubo de extremar las precauciones. Tenían mucho quehacer por delante.

Y lo que fue rarísimo es que ningún peatón se estrellara en aquella pista de patinaje en la que se convirtió el barrizal, en especial este cronista torpe, que esta vez y sin que sirva de precedente, no acabó espanzurrado.

Quedó caza en el campo que no se pudo cobrar hasta el día siguiente, reses pinchadas o de los agarres de los perros.

Los monteros ya habían degustado las exquisiteces de Catering Cáceres Pajuelo, turno para los equipos de trabajo.

Arroz con bogavante includo, ¡merecidísimo!

con Pelillo montería con Pelillo montería

El trabajo bien hecho

Antes os llame VALIENTES, ahora solo me queda felicitaros de corazón y daros la enhorabuena por este festival montero bajo la lluvia:

A la organización, a Javier, a Jorge y a todo el equipo de Pelillo Servicios Cinegéticos. Se lo merecen.

En un momento dado reflexionaron, redujeron el programa, poco a poco lo han ido aumentado con monterías escogidas y se han asentado plenamente en el panorama montero con una interesantísima oferta.

A Álvaro y a su familia, por sus desvelos, mimo y cuidado para mantener Malueñez de Arriba, no es fácil. A Lolo, a su familia y a todo el equipo de la finca.

Y es de justicia hacer extensivas las felicitaciones y dar la enhorabuena a: monteros y acompañantes, rehaleros, guías, postores, cargueros, arrieros, ayudantes, personal del catering, taxidermista, veterinarios, carniceros… a todos los que participaron de una manera u otra en estas Llanas de Malueñez de Arriba.

Fue el trabajo bien hecho.

con Pelillo montería

Las Llanas de Malueñez de Arriba aún no ha alcanzado su techo

Señalar que por sus especiales características, las Llanas no sólo se mantendrán en este nivel, en un día de climatología apacible, pueden perfectamente superar estos resultados.

Esta mancha aún no ha alcanzado su techo.

Significar, así mismo, que tras cinco temporadas sin cazarse, la próxima temporada se monteará la Sierra de Malueñez de Arriba.

Otra finca emblemática tachada de la lista de «por conocer».

Rumbo a casa otra vez muy satisfecho, me alegro mucho cuando a la gente que aprecio le salen bien las cosas.

Crónica y fotografías (excepto las que se indican): Adolfo Sanz Rueda

con Pelillo montería con Pelillo montería

DATOS DE LA MONTERÍA

con Pelillo montería

Organización: Pelillo Servicios Cinegéticos

Fecha: 15 de noviembre de 2025

Finca: Malueñez de Arriba / Finca abierta / Mancha: Llanas

Hectáreas monteadas: 900 aprox.

Termino: Jaraicejo, Cáceres

Puestos: 37 / Cupo: 4 venados, algunos puestos 1 cierva; jabalíes, gamos y gamas sin cupo / Rehalas: 15

Venados: 112 (25 muy buenos de montería, con 1 bronce)

Jabalíes: 19 (3 navajeros)

Gamos: 5

Ciervas: 20

con Pelillo montería
Jacobo y Álvaro (arriba) y Javier y Jorge (abajo) con el venado más grande cobrado, un precioso 16 puntas.

con Pelillo montería

con Pelillo montería
Fotografía: Javier Rodríguez / Pelillo Servicios Cinegéticos

 

Relacionado

Y entonces Pelillo se marca una obra de arte en Malueñez de Arriba

Premios Caracola 2023-2024 en Cortegana: se imponen La Cepilla, Malueñez de Arriba, Dehesa El Borbollón, El Carrascal, La Atalaya y Chaparrón

Espectacular y vibrante Gala de los 41º Premios Caracola: se imponen Valdeolivas, El Azuche, Los Pastizales, Casagata, Los Tejos y Cochureros

 

COLABORADORES

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.