Tan sólo una cifra, pues no puede ser logro lo que nunca fue un objetivo. Sin embargo, su redondez me obliga a celebrar con ustedes, por aquello de que es de bien nacido ser agradecido, y reconocer su acogida, la dedicación de su tiempo y sus ánimos, para seguir dándoles la turra, tanto desde mis libros como desde aquí, con los artículos.
Aportar mi grano de arena en favor de la caza e intentar alentar el interés por la lectura
Aportar mi grano de arena en favor de la caza e intentar alentar el interés por la lectura, que bien pudieran esos vientos soplar en favor de los títulos de los que soy autor, fueron argumentos suficientes para aceptar el ofrecimiento que me brindó Amparo Ampuero, ahora directora de Trofeo, a finales de 2019 y, desde ese momento, con Adolfo Sanz Rueda, alma mater de Caza y Safaris (CazaWonke).
Las revistas han de ser, y lo son, un referente para el sector, punto de encuentro que recoja lo que nos ocupa y preocupa. Lugar donde se respire la actualidad de la caza entre artículos, reportajes, noticias, publicidad y, por supuesto, libros. Lugar de conocimiento y entretenimiento.
Cien, decía, los artículos publicados en este medio
Cien, decía, los artículos publicados en este medio tan apreciado y valorado por todos los aficionados a la actividad cinegética, sede de nuestra afición, de nuestra pasión. Nunca pensé que la colaboración alcanzaría esta cifra ni mucho menos, pero ya ven, se empieza por dar un ganchito y se termina dando la finca entera.
Retratar problemas, dignificar su práctica poniendo el acento en lo que la rodea seguirá siendo mi zona de campeo, elevando la voz de lo rural para que a la España vacía se la oiga y escuche. Y no han de faltar recuerdos, memorias y originales anécdotas que brotan a diario, servidas en su propio contexto y sin ningún afán de protagonismo, donde la verdad descrita será incuestionable, como la libertad que da transitar caminos que distan de la endogamia que, a mi juicio, envuelve al mundo cinegético.
Seguiré escribiendo, retratando la vida como los paisajes, desde esta elegida retranca
Y seguiré escribiendo, retratando la vida como los paisajes, desde esta elegida retranca, sumando, para que la caza no pierda sus raíces y discurra su andadura y futuro, al margen de modas. Cargando, obviamente, con las nuevas responsabilidades a las que nos obligan los tiempos actuales, pero conservando el equilibrio entre lo ancestral y el presente, que por ahí debiera discurrir, por aguas, siempre, de la caza salvaje.
Convencido de que somos y seremos cazadores, nadie debiera albergar dudas de que la naturaleza nos necesita, como tampoco del valor que aportamos a esta y a la sociedad, que ya va dando alguna muestra de ello, reconociendo y recompensando lo que hacemos.
Y más que habrán de llegar, tiempo al tiempo.
Reitero mi agradecimiento.
¡Por la caza, por ustedes!
Cien; texto y fotografías: Ángel Luis Casado Molina
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