Según el comisario José Humberto de Melo, han sido detenidos cuatro ecologistas implicados en los incendios de la Amazonia y que vendieron fotos de los mismos a WWF, que no es objeto de la investigación.
La policía brasileña detuvo este martes a cuatro voluntarios, entre ellos miembros de diversas ONG que ayudaron a combatir los incendios en la Amazonia brasileña. Estén acusados de provocar el fuego de forma intencional, según informa Efe.
Las cuatro detenidos integraban un grupo contra incendios en Alter do Chao, un distrito de la ciudad de Santarem, en el estado amazónico de Pará. Fueron arrestados por ser sospechosos de causar incendios en dicha región para, presuntamente, recibir donaciones, según informó la policía.
Las autoridades también registraron la sede de la ONG Projeto Saúde e Alegria. Es una de las más reconocidas de la región y su director, Caetano Scannavino, negó cualquier tipo de irregularidad en una rueda de prensa en Brasilia. «No sabemos hasta ahora de qué estamos siendo acusados, porque fueron hasta nuestra oficina sin una decisión judicial, con un mandato genérico, para aprehenderlo todo».
El comisario de la Policía Civil, José Humberto de Melo, explicó al diario O Estado de Sao Paulo que al menos tres ONG -Brigada Alter do Chão, Aquíferos Alter do Chão y Projeto Saúde e Alegria (PSA)- habrían provocado los incendios para recibir recursos de diversas organizaciones.
¿Fotos vendidas a WWF?
De Melo señaló que los implicados llegaron a vender fotos de los incendios que ellos mismos provocaron para el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF), que no es objeto de la investigación.
WWF, en un comunicado, explicó que firmó un contrato con el Instituto Aquífero Alter do Chão para ayudar en la compra de equipos para el combate de incendios por valor de 70.654 reales (unos 17.663 dólares).
No obstante, recalcó que WWF-Brasil «no adquirió ninguna foto o imagen de la Brigada, ni recibió donación del actor Leonardo DiCaprio. Tales informaciones que están circulando no son verdad».
La Amazonia brasileña registró los meses de agosto y septiembre sus peores incendios en más de una década. Una situación que los especialistas atribuyen al aumento de la deforestación en la región.
Jair Bolsonaro, fue duramente criticado por estos incendios –de hecho, se llegó a decir que era el principal responsable de que la selva ardiera–. El presidente de Brasil llegó a acusar a las ONG ecologistas de estar detrás de los incendios en la Amazonia. Quizás no erró su tiro.
Fuente: Libertad Digital
