El furtivismo sobre los rinocerontes se dispara en Botsuana y un total de 31 ejemplares han sido abatidos por furtivos desde octubre de 2018 en el delta del Okavango (norte de Botsuana), lo que supone un incremento considerable de la caza ilegal de este animal, según informó este martes el Gobierno del país.
El pasado octubre, el Ministerio de Medio Ambiente, Recursos Naturales, Conservación y Turismo ya informó que desde abril habían sido abatidos nueve rinocerontes, aunque desde entonces y en sólo tres meses los furtivos han acabado con otros trece.
«Esto sitúa el número de rinocerontes cazados desde octubre de 2018 en 31, de los cuales 23 fueron rinocerontes blancos y ocho, negros», ha asegurado el Ministerio en un comunicado.
«El Gobierno ha reforzado considerablemente sus esfuerzos para atajar la situación de caza furtiva con intervenciones que han permitido recuperar algunos cuernos y armas de caza», explicó el ministerio en el comunicado, donde informa de que siete furtivos han muerto en estas operaciones, al resistirse a ser arrestados.
Solo 400 ejemplares en Botsuana
La población actual de rinocerontes de este país del África meridional se sitúa solo ligeramente por encima de los 400 ejemplares y la mayoría viven en la zona del delta del Okavango (norte). Botsuana es también famosa por ser el país del mundo con mayor población de elefantes.
El furtivismo sobre los rinocerontes se realiza para hacerse con sus cuernos, que se venden sobre todo en los mercados asiáticos, donde se le atribuyen propiedades curativas y afrodisíacas. En el mercado negro, el cuerno alcanza valores de entre 60.000 y 80.000 dólares por kilo.
Fuente: rtve.es