El éxito de la marca low cost de Renault no para. Prueba de ello es esta edición limitada con unas mejoras estéticas y efectivas que lo convierten en un singular todoterreno de bajo coste, pero que se defiende bien en el campo.
El Dacia Duster Aventure en su versión 4×4 fue presentado en el reciente Salón de Ginebra y sorprendió por su iniciativa jovial y atractiva. Además de poseer un marcado look al más puro estilo Miguel de la Quadra, incorpora unas llamativas decoraciones laterales y en el capó, de ésas de no pasar desapercibido, y también llega a ser muy reconocible por el juego de faros instalados en el techo, que bien podían denominarse ‘de furtivo’, eso sí, la barra del techo que soporta las luces es totalmente desmontable, ¡menos mal!
En términos generales, nos gusta dentro de su condición de todoterreno. Aunque no integre autoblocante, ni reductora, cabe destacar su altura de 21 cm respecto al suelo, algo más que la vadeada por un Grand Vitara, por poner un ejemplo, así como las imprescindibles protecciones cubrecarter para las partes delantera y trasera, un accesorio indispensable para aquellos que nos gusta salirnos del camino. Por dentro, un detalle importante: la sufrida tapicería con alfombrillas de goma que denota estar pensado para sufrir todas las inclemencias de nuestros días de caza.
El motor dCI de 109 CV es más que suficiente para su peso, obteniendo una excelente relación peso/potencia gracias a sus 1.255 k. Incorpora una caja de cambios manual de seis velocidades que saca una primera verdaderamente corta, haciendo casi las funciones de reductora para afrontar las pendientes más pronunciadas. El habitáculo interior no tiene concesiones al lujo, es bastante holgado con espacio suficiente para cuatro personas adultas, con un maletero de 443 litros muy espacioso en altura, al que podremos ganar volumen abatiendo las butacas posteriores. Cabe destacar que el modelo 4×2 obtiene más capacidad de maletero debido a que monta una suspensión trasera diferente y el alojamiento de la rueda de repuesto es exterior.
Esta edición limitada ya cuenta con control de estabilidad, algo exigible pues no todos los modelos de la casa lo incorporan de serie, neumáticos Cross Contact, de Continental, de uso mixto campo y carretera, y suspensión delantera independiente con barra de torsión y trasera McPherson, también independiente con barra estabilizadora. Como se mencionaba al principio, la altura libre al suelo es generosa, de 210 mm, si añadimos que su cota de ataque llega a los 30º, siendo la de salida de 36º, nos damos cuenta que es suficiente para badear caminos sin meternos en zonas demasiado complicadas. Se ha de tener en cuenta la falta de función autoblocante, que nos dejará sin tracción en el momento que una de las ruedas quede suspendida en el aire.
En esta versión existe la posibilidad de seleccionar tres diferentes modos de tracción mediante el botón situado en la consola central. La función 2WD transmite toda la fuerza del motor a las ruedas delanteras, la posición Autoreparte la tracción entre los ejes delantero y trasero pudiendo llegar a este último hasta un 50 % de la potencia total, y el modo Lock que se encargará de repartir el par motor de forma equitativa entre ejes.
Podemos decir que nos gusta el Duster como opción de batalla para nuestra salidas camperas, al coto o la finca, para realizar trabajos y labores de campo como sustitución al mítico Reanult 4L; nos agrada por sus dimensiones y capacidad de maletero; pero, sobre todo, por su valor, sólo comparable a competidores por prestaciones como el Skoda Yeti y, en medida, al Grand Vitara, Qashqai o Mitsubishi ASX; eso sí, todos ellos serán opciones bastante más elevadas de precio.
FICHA TÉCNICA
MOTOR: dCI 110 diésel
CILINDRADA: 1.461 cc
POTENCIA MÁXIMA: 109 CV
VELOCIDAD MÁXIMA: 168 km/h
CONSUMO MEDIO OFICIAL/ESTIMADO: 6,5/100 km
VOLUMEN MALETERO 2/3 filas asientos: 443 litros
COTA DE ENTRADA/SALIDA/VENTRAL: 30/33/26 grados
ALTURA SUELO: 210 milímetros
PRECIO ORIENTATIVO: desde 15.200 €
Javier Fuentes