El restaurante La Montería era el punto de encuentro, un año más, en el día de la Hispanidad para los cazadores que Cinegética Garrido iba a albergar en la montería a celebrar en la finca Valdelacasa.
Concretamente la mancha de El Cobertizo sería la escogida por el amigo Enrique Garrido para abrir la temporada en un día en el que el calor amenazaba con apretar.
Sorteo madrugador Garrido
Por eso, a las siete se daban cita los primeros cazadores comenzando sin dilación alguna el sorteo de posturas pasadas las siete y media de la mañana.
Tras dar las últimas indicaciones sobre el estado de la mancha y los animales que se podrían abatir, fueron saliendo uno a uno los cazadores a recoger su suerte de encima de la mesa, y se iban organizando en la salida a la vez que se completaban las armadas.
Así, la primera de las armadas salía hacia el cazadero pasadas las ocho y cuarto de la mañana y la última a las diez.
Los cierres de Aceitunilla, Aceituna, la Cuerda y Peñaquemada, salían casi al unísono, siguiéndole el Valle y, cuando quiso ponerse el Sopié, se cobraba uno de los mejores venados en Aceitunilla que con mano diestra el amigo Raúl detenía para siempre.
Algunos disparos, pocos, para los que acostumbra esta finca, se escuchaban mientras terminaban de entrar las traviesas del geodésico de la Casa, de la Mina, del Manantío y los Canchos, que terminaban por completar el mapa de la montería.
Estratagema en las sueltas por el calor Garrido
Las rehalas, retenidas en la entrada de la finca, se fueron distribuyendo en numerosas sueltas.
En esta ocasión se iba a realizar un experimento, se iba a soltar directamente donde normalmente se encuentran los encames, o al menos, lo más cerca posible, por el excesivo calor que sufríamos, con la intención de coger a los marranos con los perros frescos.
Así, daban las once y media cuando se abrían portones y las campanillas sonaban por toda la extensión de la mancha con esas carreras alocadas y sin sentido de los primeros momentos.
Aciertos y fallos Garrido
Fueron minutos largos, de tensión, los que se vivieron hasta que las rehalas dieron con los primeros animales, estando reforzada la parte de la mancha y algo más desnuda las llanas de perros que en otras ocasiones.
Carreras tras las reses que terminaban con los disparos de los monteros, que afortunados como Carlos Hormigo se hacían con uno o varios venados y desafortunados como un servidor, que fallaba a bocajarro una mole de cochino, pero, en fin, eso es la caza, aciertos y fallos, puestos de muchos lances, puestos de airear…
Poco a poco fue transcurriendo la montería, inusualmente con más lances en la parte alta, quizá por la pequeña ausencia de perros en la parte más baja y por el excesivo calor.
Fueron veinticinco venados y siete jabalíes los que hicieron del día de la Hispanidad una fiesta
A las tres de la tarde estaban todos los monteros en la comida y fue llegando la caza poco a poco al plantel, destacando cuatro venados muy bonitos y un cochino que alegra la temporada al más pintado, siendo veinticinco ciervos y siete jabalíes el total de los cobrados en esta montería, que una vez más, hizo del día de la Hispanidad una fiesta.
Enhorabuena Enrique, y enhorabuena a los afortunados en este arranque de campaña.
Crónica y fotografías: Carlos Casilda Sánchez
DATOS DE LA MONTERÍA
Organización: Cinegética Garrido
Fecha: 12 de octubre de 2021
Finca: Valdelacasa / Finca abierta / Mancha: El Cobertizo
Hectáreas monteadas: 750
Localidad: Aliseda, Cáceres
Puestos: 50 / Sin cupo / Rehalas: 22
Venados: 25
Jabalíes: 7 con 1 navajero
Ciervas: 8