La Conselleria de Agricultura de la Generalitat de Cataluña prohibirá cazar depredadores de conejos, como el zorro, en las zonas de Lérida en las que la plaga de esta especie está provocando daños en los cultivos, principalmente en cereales y frutales.
El director de los Servicios Territoriales, Ferran de Noguera, ha anunciado la medida en la Comisión de seguimiento del plan piloto de prevención y mitigación de los daños producidos por el conejo en la que además de la Generalitat participan cazadores y ayuntamientos, que ha aprobado la decisión de la Conselleria.
La comisión ha acordado también mantener las medidas acordadas en febrero, que consisten básicamente en autorizar cazas en los cotos privados todos los días y cacerías nocturnas programadas, en las que participa el Cuerpo de Agentes Rurales, e incrementará el número, según ha explicado en rueda de prensa el director de los Servicios Territoriales, Ferran de Noguera.
Los Agentes Rurales, que hasta ahora disponían de un coche para estas batidas, tendrán dos a partir de ahora, ha señalado Ferran de Noguera, que ha anunciado que, en los pueblos en los que los cazadores no puedan comprometerse a cazar con regularidad, se autorizarán de oficio batidas de cazadores de otras zonas.
Desde abril, cuando comenzaron a autorizarse batidas nocturnas y cacerías diarias, se han sacrificado unos 3.600 conejos, unos 2.400 en cotos de caza y unos 1.200 en las cacerías nocturnas.
Ferran de Noguera ha señalado que en el censo que se ha hecho en mayo se ha detectado una ligera reducción de conejos, aunque el número sigue siendo elevado al situarse el número en 144 animales por kilómetro cuadrado, por debajo de los 166 registrados en febrero.
Censo «extraordinario»
Ha expresado que generalmente el censo de conejos es más elevado en verano y ha matizado que Agricultura suele hacer dos censos al año, uno en invierno y otro en verano, por lo que el censo de mayo ha sido «extraordinario».
Los alcaldes y concejales que han asistido a la reunión aseguran que, aunque se han tomado medidas, el problema no se ha solucionado y los agricultores están sufriendo muchos daños en sus cultivos.
El alcalde de Seròs, Gabriel Pena, ha explicado que «los payeses cada día están más crispados», ha considerado que la proliferación es imparable y ha añadido que los mayores daños se dan en los árboles frutales.
Por su parte, el concejal de Deportes de Rossellò, Joan Andrès Urbano, ha contado que en su pueblo en las dos batidas nocturnas se mataron 150 conejos y que ya llevan tres años de lucha contra los conejos.
Fuente: 20minutos.es