Todos podemos ayudar a que disminuya el número de furtivos en todo el planeta. ¿Qué acciones podemos llevar a cabo y qué debemos saber?
La triste realidad es que los furtivos están acabando con miles de especies. Entre ellos rinocerontes negros, tigres, gorilas y otras tantas. La cacería ilegal es bastante común en África, América del Sur y en el Sudeste Asiático. Son regiones tan biodiversas que se pretende conseguir ganancias a corto plazo. Después de todo, el tráfico ilegal de especies hoy en día es uno de los negocios que más dinero genera en el planeta.
¿Cómo evitar el furtivismo?
Motivado a la lucha contra el furtivismo, en 2015 la ONU aprobó una resolución que obliga a los países a reducir el furtivismo y el tráfico ilegal de animales. Este documento fue promovido por 84 países con el objetivo de impulsar leyes que endurezcan las penalizaciones para quienes incurran en estos delitos.
En otras regiones y circunstancias también se han promovido algunas normas. Como la prohibición de la comercialización del marfil o el aumento del número de patrullas debidamente armadas para controlar a los furtivos.
Además, no hay que adquirir productos fabricados con materia prima de especies animales protegidos. También es muy importante apoyar la creación de espacios protegidos y la conservación de los ecosistemas naturales.
Los furtivos: el lucro de la extinción
El rastro sangriento del furtivismo va arrasando con todo a su paso, y este oscuro negocio ocupa el tercer puesto del crimen organizado a nivel mundial. Alrededor de 20.000 millones de euros al año es el ingreso de un mercado negro, que se nutre de más de trescientos mamíferos.
Fuente: okdiario.com
