Panorama montero

La lluvia marcó el inicio de Monteros de Encinasola en Puerto Bermejo

de Encinasola en monteros
La lluvia marcó el inicio de Monteros de Encinasola en Puerto Bermejo.
Por mucho que antes de sortear hiciera sol y dos instituciones de esta peña montera, Paco Berjano y Javier Muñiz, mostraran esa joya de cartel de Hornady.

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CRÓNICA DE PUERTO BERMEJO

CLUB DEPORTIVO MONTEROS DE ENCINASOLA

Abría la temporada de caza de forma particular esta organización onubense citando a sus monteros, como es habitual, en el hotel de Encinasola en la mañana del pasado 26 de octubre.

Con la mirada puesta al cielo, dado que las previsiones de lluvia estaban previstas justo para las horas principales en las que iba a transcurrir la acción de caza, se reunían los allí presentes.

En esta ocasión, contaban con la presencia de los cronistas Hornady que llevaron unos regalos para los monteros.

En familia

Por ser una montería pequeñita no se ofreció ni desayuno y después de la misma la comida sería de hermandad, con viandas aportadas por los asistentes, que prácticamente se ceñía a los habituales de este club deportivo de monteros.

Así, con caras todas conocidas y tras los saludos correspondientes se seguían con atención las indicaciones de Paco Berjano, Antonio Luis Boza y el joven Carlos que viene para tirar del carro.

Inmediatamente después arrancaba el sorteo tras el correspondiente rezo por parte de Alfonso Aguado, pidiendo por los monteros que ya no nos acompañan.

La salida de armadas fue de forma ordenada, sorteando esta vez por lista sin el clásico bingo que suele ser la forma habitual de sortear en esta casa.

Una armada de lujo, pero mal augurio

El día nublado nos daba la bienvenida entrando en la preciosa finca del Campillo en la que ya se respiraba montería.

Poco a poco se fueron colocando las posturas, la nuestra en el 1 Javier Muñiz, en el 2 un servidor acompañado de mi buen amigo Ángel, al 3 Lorenzo Miguela con su hijo Gabriel, al 4 mi tocayo Carlitos y en el cinco el propio Paco Berjano. Una armada de lujo.

Al colocarme en mi sitio, mal augurio, aire en la nuca mientras cargaba el rifle, momento en el que se escuchaban ya los primeros disparos con la entrada de las rehalas, cada una a su suelta.

La caza se repartió por todas las armadas

Al ser una zona sin mancha alguna la que se iba a cazar, se realizaron varias sueltas prácticamente en las zonas de querencia que se conocen de las reses, para esparcirlas por todo el mapa de la montería.

Y así fue, justo después de abrir portones se produjeron lances prácticamente en todas las armadas, repartiéndose la caza.

Neblina meona que apretaba a rachas

El agua no quiso perderse la cita y fue puntual.

A las doce decía la aplicación que comenzaba a llover y a las doce menos cuarto comenzó una neblina meona que apretaba a rachas y prácticamente no cesó hasta las cuatro de la tarde.

Las rehalas se emplearon a fondo disfrutando de una estupenda dehesa, ya con hierba que facilitaba el trabajo y con reses que iban jugando al escondite con perros y perreros.

Así, hubo lances esparcidos de principio a fin.

de Encinasola en monteros

Un gran venado se salió de la mancha sin ser tirado

El mejor venado de la montería se perdía por mi cierre sin jugar lance con él, dado que cogió al amigo Paco pendiente de móvil, emisora y organización, un venado que se metía en la mancha del moro, y esperemos ahí se quede hasta la fecha de cazar la misma, dado que se tenía visto y cuenta con 18 preciosas puntas.

Un ‘día de perros’ que deslució una montería que podía haber sido perfecta

Sobre las tres se retiraba a los monteros de los puestos, abandonando muchos de ellos la finca por la lluvia sin pararse a la comida de hermandad, que allí se disfrutó muy a pesar del ‘día de perros’ que se había puesto.

Cuando volví a casa se estaban terminando de sacar los 14 venados que se habían cobrado, sin formar plantel, debido a que tal como iban llegando se iban arreglando y retirando el trofeo por cada montero, al no tener lugar donde refugiarse en el lugar previsto al efecto, salvo el coche propio.

Desluciendo así la lluvia un día de caza que podría haber sido perfecto.

Se cobró un vedado con una curiosa cuerna izquierda rematada en porra.

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¡Accidentes de tráfico de despedida! Afortunadamente sin daños personales

Para colmo, varios monteros sufrieron un accidente de tráfico, en primer lugar, el amigo José Cándido que se daba con un quitamiedos tras irse el coche en una curva, e inmediatamente después el amigo Becerra se salía en el mismo lugar con su rehala. Afortunadamente sin daños personales para ninguno de ellos, ni para los perros. Pero no quedó ahí la cosa, sino que unas horas después, se salía en el mismo lugar el amigo Caballero, con el mismo resultado, sin daños personales ni para rehaleros ni perros.

Fue el final de un día de caza, marcado por la lluvia.

Crónica y fotografías Carlos Casilda Sánchez

DATOS DE LA MONTERÍA

CD Monteros de Encinasola

Organización: Club Deportivo Monteros de Encinasola

Fecha: 26 de octubre de 2024

Finca: Puerto Bermejo / Finca abierta

Hectáreas monteadas: 200

 Término: Encinasola, Huelva

Puestos: 26 / Sin cupo / Rehalas: 6

Venados: 14

Ciervas: 5

 

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