El Gobierno, aprovechando el periodo vacacional, y a la cabeza la ministra de Derechos Sociales Ione Belarra, ha aprobado el proyecto de la Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales, el cual demuestra las intenciones que tiene la dictadura animalista.
Un proyecto de Ley que:
•Cambia completamente el actual sistema de protección de los animales, dirigido por las peregrinas ideas de los animalistas, que son una insignificante minoría frente a la sociedad.
•Modifica y echa abajo todo el sistema de veterinarios oficiales que existen en todas las comunidades autónomas, ocasionando la muerte del Núcleo Zoológico, convirtiendo a los veterinarios clínicos en comisarios políticos.
•Choca con muchas de sus imposiciones con las competencias que están atribuidas a las CCAA que han sido ratificadas por el Tribunal Constitucional, y tropieza con la 17 leyes y normativas autonómicas que actualmente están en vigor.
•Ataca la biodiversidad natural y a las razas caninas españolas, y la convivencia del mundo y medio rural.
•Pretende nutrir al lobby vegano/animalista de dinero público, creando lo que se viene llamando «el chiringuito animalista del Gobierno».
•Impone a las arcas de las Administraciones Públicas y los bolsillos de todos los contribuyentes mantengan su lobby animalista por Ley.
•Y, por último, por más que a lo largo de sus borradores se ha ido eliminando algunos aspectos que afectan a la actividad cinegética, el fondo de la ley sigue siendo el mismo, y por lo tanto es un proyecto de Ley que no debe ser ni tramitado ni aprobado.
La UNAC solicita públicamente que las Cortes Generales no aprueben el proyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales
La Unión Nacional de Asociaciones de Caza (UNAC) solicita públicamente que las Cortes Generales no aprueben el proyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales, tal como ya se manifestó en anteriores ocasiones al Gobierno, y pide a los grupos políticos, parlamentarios, diputados, senadores, y gobiernos autonómicos que mediten y piensen el daño que van hacer al mundo rural y a los propietarios de los animales con la aprobación de este bodrio de proyecto de Ley.
Este proyecto de Ley se cansa de citar a los animales de compañía pero que no hace ni mención alguna al Convenio europeo sobre protección de animales de compañía, hecho en Estrasburgo el 13 de noviembre de 1987, y que tiene por objeto garantizar el bienestar de los animales en general y que España y las Cortes Generales se obligó y ratificó el 23 de junio de 2017, y que define claramente lo que son animales de compañía, y poco o nada tiene que ver con lo que pretende legislar este proyecto de Ley.