Vídeo mensaje de José Ignacio Herce Álvarez: «Desearos que tengáis ganas de luchar por salir adelante»
El reto no es de los pequeños, suplantar a José Ignacio Herce Álvarez (JIH) en sus propios coloquios, no se va a entrevistar él mismo.
Pero lo mismo no es para tanto, porque este cronista pillo, que responde por Adolfo Sanz Rueda (ASR), ha tomado la planilla del amigo de otros coloquios y no en pocas ocasiones ha utilizado sus propias preguntas.
Pero el personaje da para tanto, que aquí el entrevistador casi sobra.
José Ignacio Herce es discreto y modesto, como demuestra en el vídeo mensaje, aunque se equivoca, tiene perfil y categoría de sobra para este coloquio y para muchísimas cosas más.
Cazador prácticamente desde niño, gestor, fue empresario cinegético en su juventud.
Escritor excelente, prolijo, firmando innumerables artículos, curiosamente casi todos los cinegéticos bajo pseudónimo. Además de los de caza, escribe de lo taurino y del arte con la soltura del conocimiento, y de la opinión social desde el sentimiento.
José Ignacio es director de la Reserva de Caza de Sonsaz-Madrid y secretario de la Comisión de Homologación de Trofeos de Caza Mayor de la Comunidad de Madrid.
Pero además, es presidente del Club de Tiro Olímpico Alcor, vicepresidente de la Asociación Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo (APAVT) y algo más que un aficionado a los toros, un auténtico experto de la tauromaquia.
ASR: Lo primero, José Ignacio, ¿cómo estáis los tuyos y tú?
JIH: Gracias a Dios todos bien, no hemos tenido que padecer ningún tipo de problema en el entorno más cercano, aunque por supuesto y como casi todos, tenemos conocidos que se han visto afectados por la enfermedad en mayor o menor intensidad.
ASR: ¿Dónde estabas cuando se anunció la cuarentena?
JIH: Me pilló en Madrid y aquí hemos pasado todo este periodo.
Con esa sensación de vivir encerrados en un piso, pero, bueno, lo hemos sobrellevado con ‘resignación’ pero bien.
ASR: ¿Tienes o has tenido miedo a la enfermedad? Herce
JIH: Sí. Fíjate, es una cosa que a lo largo de los coloquios me ha chocado mucho, porque casi toda la gente lo que me decía era que no, por lo que tengo la sensación ser un cobardón absoluto, pero la verdad es que miedo no, lo siguiente. No voy a negarlo.
Casi todos me decían «yo lo que tengo es respeto» o «acepto lo que venga»… yo tengo un miedo total, absoluto.
¿Por qué? Muy sencillo, porque es una enfermedad en la que te levantas por la mañana tan a gusto tan feliz y esa misma noche puedes estar boca abajo con un respirador durante un mes y con coma inducido, o en la morgue y eso es para preocuparte….
«A mí eso me da miedo, no puedo mentir, ni respeto ni otra cosa, me da miedo, y me sigue dando miedo porque es un tema muy peligroso que ahora nos estamos tomando un poco a broma»
Lo cierto es que creo que ha habido una mala información por parte del Gobierno, nos ha vendido el Resistiré, imágenes de niños saltando y bailando en casa y la gente en los balcones, cuando realmente lo que había que haber sacado eran esas UVIS y esas morgues… creo que se ha jugado con la información, otros países sí que han sacado esas imágenes… Por eso insisto, miedo sí, y ahora más porque sigue ahí, y parece que no nos damos cuenta, nos amontonamos en las terrazas, centros comerciales…
ASR: ¿Lo primero que se te ocurrió cuando anunciaron la pandemia? Herce
JIH: ¡Dios mío la que nos ha caído! Enlazo un poco con la pregunta anterior.
Me acuerdo que cuando saltó el tema de Italia dije «los siguientes somos nosotros, vamos detrás», y efectivamente hemos ido detrás.
¿Que qué se me ocurrió? ¡Dios mío, qué miedo! ¿Por qué? Porque pasamos de una ‘gripecilla’ al estado de alarma y no tienes una información veraz sobre el tema. Había gran desconocimiento, y mi preocupación era ¿lo tendré o no lo tendré? Por nuestro trabajo tenemos contacto con gente, con mucha gente de todos los sitios, y sobre todo por los míos, esa era mi gran preocupación ¿lo tendré yo y, sobre todo se lo habré pasado a los míos?
Además, como bien sabes soy presidente del Club de Tiro Olímpico Alcor, y precisamente los días 7 y 8 de marzo había organizado una prueba internacional de tiro, que estuve a punto de suspender y no suspendí porque el Gobierno no había dicho nada, y claro, después de hacer estado con cientos de personas te surge la preocupación.
¿Luego? ¿Y ahora qué va a ocurrir? Vamos a entrar en cuarentena y nos vamos a encerrar… a partir de ahí ya lo que tú quieras… eso sí, no fui a comprar papel higiénico (ríe).
ASR: ¿Cómo has afrontado estos días de cuarentena? ¿Qué has hecho? Herce
JIH: También me sorprendo, veo que la gente ha ordenado la biblioteca, el garaje, la ropa, los zapatos…
¡A mí no me ha dado tiempo a nada! (ríe).
Primero por el teletrabajo, esto es un ‘engaño’, la gente se piensa que por trabajar en casa no das un palo al agua, el teletrabajo es mucho peor porque aparentemente no tienes horario.
«Esto es un ‘engaño’, la gente se piensa que por trabajar en casa no das un palo al agua, el teletrabajo es mucho peor porque aparentemente no tienes horario»
Luego estos coloquios que me ha ‘colado’ don Adolfo Sanz (ríe abiertamente) que me han llevado mucho tiempo porque los coloquios son una conversación que establezco con el entrevistado, no son preguntas que se le mandan por correo y que me devuelve, ¡no, no!, es una hora y pico charlando y después de ahí extractar lo que se va a publicar, eso se traduce muchas horas (doy fe).
También he escrito muchos artículos de toros, política, arte… el caso es que todo lo que quería hacer de ordenar y cosas así no he podido hacerlo.
ASR: ¿Crees que esta crisis cambiará nuestro modo de ver la vida? Herce
JIH: A corto plazo seguro, porque de hecho se está viendo cuando nos encontramos con alguien y nuestra primera reacción es darle un abrazo, pero rápido nos sale otra inmediata que te dice «¡quieto, parado!», esa reacción ya existe, está ahí.
Lo que no sé es cuánto durará, el español tiene memoria de pez, al principio es muy intenso, pero tiende a olvidarse sobre la marcha. Aun así, creo intentaremos retomar nuestras costumbres porque somos mediterráneos, el calor, el afecto, los abrazos… eso lo vamos a recuperar, pero no al cien por cien, de aquí va a quedar siempre un punto de temor que va a tardar en marcharse.
Quizá sea hasta bueno, no lo sé, lo que si es cierto es que de alguna manera vamos a tener un tiempo largo en el cual nos vamos a contener en esos deseos de acercarnos a la gente, lo cual es una pena porque es parte de nuestra idiosincrasia.
ASR: ¿Qué has echado en falta durante la cuarentena?
JIH: Salir, aunque soy muy casero, estoy muy a gusto en mi casa, es mi ‘castillo’, me encuentro muy bien, tengo mis cosas, mi música, mis libros, mi despacho… para mí no es un sufrimiento estar en casa, lo puedo asumir muy bien. Ahora bien, nuestra vida está en un porcentaje muy alto fuera, en el campo, sobre todo, salir a investigar, ver mis obras, salir a cazar…
«Lo que más he echado de menos y me ha dado mucho que pensar es la falta de libertad»
Pero lo que más he echado de menos y me ha dado mucho que pensar es la falta de libertad. Como he tenido tiempo (ríe), he ido más allá, y he pensado como realmente un ‘bicho’ nos puede mediatizar toda nuestra vida absolutamente, un ‘bicho’ que lo mismo que nos tiene meses nos ha podido tener siete años dentro de casa o directamente aniquilarnos y eso te hacer meditar sobre si realmente tenemos tanta libertad si tenemos libre albedrío… Esto nos demuestra que no, no lo tenemos.
Esa falta de libertad en todos los aspectos es lo que más he echado de menos, la impotencia de no poder hacer nada frente a la amenaza exterior.
ASR: En tus presentaciones de los coloquios, eres un defensor acérrimo del producto español. ¿Cómo crees que afectará esta pandemia al mundo rural en general? ¿Se valorará más al campo? Herce
JIH: Quiero creer que sí, quiero creer que la gente entienda lo que es el campo, lo que da el campo y lo que lo necesitamos. Pero siendo realista, creo que el urbanita seguirá siendo urbanita, creo que el urbanita va a seguir viendo el campo como una vía de escape, ¡qué bonito, verde y sano y qué bien se respira…! pero poco más por desgracia.
En cuanto a una posible vuelta al campo de la gente, sí que se puede dar esa circunstancia, pero siempre que se pongan los medios para que la se pueda volver al campo a trabajar. Todo el mundo habla de la España vaciada, todo el mundo habla que hay que llenar el campo, pero si no ponemos los medios la gente no va ir, nadie va a ir a establecerse a un pueblo si no tiene wifi desde donde poder montar su empresa o carece de los medios e infraestructuras básicas… entonces, ¿de qué estamos hablando?, no nos engañemos.
Por desgracia insisto tenemos memoria de pez y no sé hasta qué punto la sociedad mantenga si es que la ha tenido, la conciencia de que los agricultores y ganaderos han seguido trabajando, lo que han visto es que el supermercado y las tiendas seguían estando llenas y no sé hasta qué punto se plantean que eso venga de que unas personas estén en el campo de sol a sol mientras el resto estábamos en cuarentena en casa y creo que la gente no ha valorado suficientemente.
Por eso mi intención ha sido apoyar al campo, recordarlo con esa copa de vino que podía haber sido cualquier otro producto, para que la gente tome conciencia y, sobre todo, nuestros jóvenes.
ASR: Fuiste empresario cinegético, y ahora ves la caza desde el punto de vista de la Administración. ¿Cómo consideras que afectará a la caza a ésta la pandemia?
JIH: A la caza en cuanto a las especies, quizá no mucho, el tiempo que hemos estado de cuarentena no ha sido especialmente grande para que afecte a las especies en sí y su desarrollo.
Lo que sí va a afectar es al sector cinegético a la hora de organizar cacerías, sobre todo a las monterías, o digamos a las cacerías sociales, a las que reúnan mucha gente.
Se verán afectadas por varias vías, por un lado la que la propia administración sanitaria marque, los tipos de contactos, los máximos números que se permitan, por otro, que la gente va a tener miedo, y eso sí que va a frenar mucho.
Una cosa es que salgas de tu casa y vayas a cazar a 20 km con un amigo o solo, y otra cosa que tengas que ir de Barcelona a Córdoba, tengas que coger trenes, dormir en hoteles, comer en restaurantes y el propio día de la cacería, en las juntas, cacerías con 40, 60 o 100 puestos… eso puede hacer que los cazadores se lo piensen, porque ha habido y hay mucha gente afectada, directa o indirectamente y, evidentemente la crisis económica en la que nos vamos a sumergir que va a limitar mucho la capacidad de gasto de los cazadores.
«Como mínimo esta temporada va a ser de transición. Hay ganas de salir al campo, pero hay muchas reticencias y se va a notar al menos hasta la próxima temporada»
Por otra parte, se verá muy afectado todo lo que provenga del extranjero. El cazador extranjero se va a encontrar con las limitaciones que se marquen por las autoridades sanitarias en materia de desplazamientos, además de las citadas anteriormente.
Por desgracia van a ser muchos elementos los que van a confluir para que la caza no se parezca en nada a la de temporada pasada.
ASR: Aprovechando la ocasión, coméntanos algo de tu etapa como empresario cinegético y del José Ignacio Herce cazador y gestor
JIH: Efectivamente, hace muchos años tuve una etapa como empresario cinegético, con tres empresas, SALPER, IBERFAUNA y HUNTERS, fuimos de los primeros que acuñamos el termino turismo cinegético.
Fue una época muy bonita y dura que recuerdo con mucho cariño y que me ayudó a conocer mucho mejor todo el mundo de la caza y lo que supone ser empresario de caza a todos los efectos.
Después cuando llegas a la Administración lo puedes aplicar para comprender mucho mejor al administrado y, de alguna manera, mejorar el servicio público… espero (ríe).
Soy cazador desde años ha… He cazado mucho y he gestionado mucho, más de 50.000 hectáreas de terrenos de caza menor para ojeos, he organizado monterías con los perros de mi querido amigo Perico Castejón, por ejemplo, me he divertido y sufrido muchísimo (ríe).
Últimamente, por motivos familiares, me muevo menos como cazador, aunque creo que ya he desarrollado una actividad cinegética importante, pero siempre desde la discreción, sin ‘salir mucho en los papeles’, ahora me limito a ir cosas muy concretas, con amigos, lo que las circunstancias familiares me permiten.
Tengo muchos miles de perdices encima, muchos venados y cochinos… y cuando trabajas en la Administración, el conocer el terreno en el que estás trabajando desde el punto de vista del cazador, del gestor y del organizador confío en que sirve para hacer mejor las cosas.
ASR: Jabalíes, corzos… y hasta osos por las calles durante la reclusión, ¿crees que esto hará que se cambie la percepción que parte de la sociedad tiene sobre la caza?
JIH: La gente ve que hay corzos en medio de la ciudad, pero no se plantea que esos animales están ahí porque no hay un predador sobre ellos, en este caso el predador humano, el cazador. El cazador está predando sobre esas especies, está haciendo una caza que a la vez es ocio, pero también es control de esas poblaciones de tal manera que en cuanto no se han visto presionadas ni afectadas por la presencia humana, han tomado los espacios que habitualmente tenían, no hay nada que las frene.
Pero ¿llegará a la población esta imagen del cazador? Mira, si los medios no se encargan de difundirlo, la gente solo va a saber que hay un jabalí que va por una carretera, siento ser escéptico en esto.
«Hay que dar mucha publicidad para que la gente llegue a entender a esa figura como algo más que un señor pegando tiros y matando animales»
Hay que dar mucha publicidad para que la gente llegue a entender a esa figura como algo más que un señor pegando tiros y matando animales. Tiene que ser una labor muy divulgativa, muy fuerte porque el urbanita no va más allá de lo que le pone delante el televisor u otro medio.
Hay que cambiar la percepción general de la caza, dando a conocer lo que tiene de bueno en aspectos como el social, medioambiental y económico… que influye en la despoblación, y eso tiene que divulgarse, filtrarse en la mente del urbanita, y eso va a costar, porque es mucho más fácil llegarles por la vía ‘contra la caza’ que por la vía ‘a favor de’ y todo eso teniendo en cuenta que tenemos un Gobierno que no es proclive a potenciar una buena imagen del cazador.
ASR: La pregunta anterior más que referirse a la caza ‘deportiva’ se refería al control de daños, ¿qué ha hecho la Comunidad de Madrid durante el estado de alarma para controlar estos daños, este ‘exceso de fauna’?
JIH: En la Comunidad de Madrid se lleva años trabajando en el control de estas poblaciones, sobre todo jabalí y conejo, porque somos conscientes que pueden producir una serie de daños importantes a los cultivos, a la seguridad vial y sanitarios.
«En la Comunidad de Madrid se lleva años trabajando en el control de estas poblaciones, sobre todo jabalí y conejo»
Por la pandemia se han tomado medidas en este sentido también para controlar esta situación, se publicó una Resolución el 28 abril, en la cual se declararon unas comarcas de emergencia en las que se podía hacer ese control poblacional para evitar daños. La repercusión económica que puede tener un exceso de población es algo muy importante, por eso desde la Consejería se estableció este sistema, se dieron autorizaciones con mucha rapidez y en general se ha agradecido esta medida, aunque esta Resolución ha sido recurrida por los grupos ecologistas, lógicamente (ríe).
ASR: Desde que la CAM entró en fase 1 se puede cazar dentro de la misma provincia, ¿qué protocolo sanitario se ha seguido? ¿Cómo habéis hecho para repartir los precintos?
JIH: Los precintos de corzo se han repartido dentro del Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de Tres Cantos, en la sede de la Comisión de Homologación de Trofeos de Caza de la Comunidad de Madrid.
Se ha hecho perfectamente, está en el campo y cumple con todas las medidas de seguridad y sanitarias, además se aparca fácilmente cosa que se agradece (ríe).
Los corzos se están cazando ya, en cuanto a lo demás, desde que entramos en la fase 1 se pudo cazar y se está aplicando la orden de vedas sin ningún problema.
Los protocolos seguidos son los que marcó el Gobierno a través de la Orden SND/414/2020, de 16 de mayo.
ASR: ¿A nivel de la Comisión de Homologación ha tenido alguna influencia la pandemia?
JIH: Solo que había una gran cantidad de trofeos que se iban a medir justo en cuanto se declaró el estado de alarma, pero una vez que se permitieron los desplazamientos a nivel provincial, se han medido todos y ya se están repartiendo.
Eso sí, hasta que no se recupere la actividad en la Consejería de Medio Ambiente, no se admitirán trofeos.
ASR: ¿Cómo afectará o está afectando la pandemia al mundo del toro?
JIH: El mundo del toro está muy afectado, primero por las indicaciones propias que ha dado Sanidad: no se permiten aglomeraciones, festejos prohibidos…
El toro tiene una temporada, no hay corridas todo el año. Y el estado de alarma le ha cogido al toro en plena temporada por lo que se la van a pasar en blanco y eso afecta a los toreros, a las cuadrillas, porque si no se torea no se cobra y a los ganaderos, imagínate, todos esos toros, esos cinqueños, se van a perder, qué ocurre, pues que se están enviando al matadero un montón de ejemplares. Ellos siguen comiendo, la naturaleza no para, pero el ganadero no da salida a ese ganado, hay muchas ganaderías pequeñas que se van a ir a pique.
«El estado de alarma le ha cogido al toro en plena temporada por lo que se la van a pasar en blanco»
¿Dónde está el gran problema? Que por parte de las autoridades no se ha querido reconocer esto y cuando el Ministerio de Cultura reúne a los afectados por la pandemia, no habla con el mundo del toro. El toro no es cultura según ellos, se olvidan o no saben que el toro también son los festejos populares, que son muy importantes para nuestro rural.
Algunas comunidades ya se empiezan a reunir con sus afectados, Extremadura, Aragón, Castilla-La Mancha… y concretamente Madrid ha dado un paso adelante muy importante. Y creo que también Ministerio va a pedir una reunión, pero por la presión que está teniendo, tampoco veo yo muy voluntarioso al Ministerio como hacer algo en favor del toro, no veo que este Gobierno tenga una especial predisposición para hacer algo en favor del toro y del toreo, quizá a favor del toro sí, pero del toreo no.
Va a ser un año catastrófico, yo creo que los ganaderos ya son conscientes que tienen perdido el año, con todo lo que eso significa de pérdidas económicas y a todos los niveles.
ASR: Y en el tiro olímpico, ¿tendrá alguna repercusión?
JIH: Ha estado paralizado, no se podía acceder a las galerías.
Piensa que el tiro es un deporte que requiere mucho entrenamiento, los deportistas han entrenado desde sus casas, los de aire comprimido, claro (ríe), e incluso se han organizado competiciones internacionales de aire comprimido desde casa.
Se están comenzando a abrir las galerías, primero las que están el aire libre, después lo harán las galerías cerradas -que son las que se utiliza en aire comprimido-. Pero lógicamente hay que pedir cita, hay limitación de tiempo, guardar una distancia mínima de seguridad…
Al llegar a la competición tenemos que ver cómo se va a regular, nos pasa como con las monterías (ríe). Las galerías suelen ser pequeñas y tienen pocos puestos.
ASR: Estás muy vinculado a las víctimas del terrorismo, y me imagino que la cantidad de víctimas de esta pandemia te habrán producido mucha desazón, ¿cómo consideras que ha actuado el Gobierno ante esta crisis?
JIH: El Gobierno ha actuado mal sin paliativos. Herce
Primero con una mala información, como dije, al principio se nos decía que esto era una ‘gripecilla’, después se dijo que esto iba a afectar a España, pero muy poquito, hasta tal punto que se autorizaron manifestaciones masivas, y no me refiero solamente a las feministas, porque teóricamente no pasaba nada, pero resulta que al día siguiente sí que pasa, realmente ahí paso algo…
Luego, como comenté, se nos ha vendido el Resistiré, a la gente cantando, los aplausos -más que merecidos, por otra parte-, la gente feliz y contenta en casas pequeñas, pero eso es un día, no cien como han sido al final. Herce
Por otro lado, puedo entender que se intente no alarmar a la población con imágenes duras, pero nunca te tienes que alejar de la realidad, porque eso es muy peligroso, puede dar lugar a que te descuides, y eso puede tener consecuencias trágicas.
«La crisis ha sido muy mal gestionada, con contradicciones constantes, la gestión ha sido terrible a nivel político y a nivel gubernamental»
ASR: ¿Qué le pedirías al Gobierno para paliar la crisis que se nos viene encima?
JIH: Que no sea político, que sea un Gobierno que piense en España, en el país, en los españoles, en todo lo que nos vamos a encontrar ahora…
No hemos salido aún de la crisis sanitaria, y ya estamos inmersos en una crisis económica muy, muy importante, que piense en eso.
Que no piense, como están haciendo ya, en aprovecharse, para dictar medidas que vayan en beneficio solo de algunos sectores, que se piense en todos.
Y que se reúna con los agentes sociales, con todos, que hable con el campo… que hable hasta con los contrarios a nuestras ideas, pero le pido que sea imparcial a la hora de tomar decisiones, que escuche a todos y que gobierne pensando en el pueblo español, en toda la gente, que no lo haga de manera sectaria y aprovechando su situación para tomar medidas que de otra forma no podría hacer.
ASR: Han sido unos coloquios magníficos, intensos, diferentes… tienes ese don de que tu contertulio te cuente cosas muy interesantes…
No te pido que nombres a ninguno, sería injusto, pero, ¿cuál ha sido ese coloquio o esa respuesta, especialmente emotivo o que te haya sorprendido? Herce
JIH: Con los coloquios lo que intenté desde el principio, es resaltar la faceta humana del personaje, cómo vivían esto, cómo lo enfocaban… ya que a nivel profesional o cinegético son muy conocidos.
He intentado recoger todos los sectores y ver como esta crisis repercute y repercutirá en cada uno de ellos en un futuro inmediato, empresarios de ropa de caza, de monterías, perdiceros, cárnicos, restauradores, gestores, propietarios… y todos han demostrado ese amor primero por el campo y después por la caza, aunque se piense lo contrario.
Destaco, como digo, ese amor, ese reconocimiento al campo de prácticamente todos los contertulios, que es algo más que un sitio al que sales a cazar, es un lugar donde desarrollas una forma de vida, creo que eso es de lo más importante que se ha visto en los coloquios.
Luego la faceta solidaria, recuerdo a uno de ellos que se vio afectado por el coronavirus, y lo ha pasado mal, pero cuando se ha encontrado bien ha salido a echar una mano y ayudar a la gente en parroquias, otros han hecho mascarillas o batas…
«Esa solidaridad que se ha mostrado por este colectivo, es algo a destacar, por encima de la propia caza en sí, eso es importante, ha sido muy bonito»
Y sobre todo se desprende la importancia de ese campo para la subsistencia de la población, que conviene que se recalque y lleve a esa valoración del campo como sistema de vida, para vivir en él o para disfrutar de él.
Otra cosa que me divirtió es ver como muchos de nuestros invitados que se mueven mucho y están bastante fuera de casa, han valorado estar tanto tiempo en ella. No pocas veces nos hemos planteado que nos estamos perdiendo algo, vivimos con mucha intensidad, trabajamos mucho, pero nos estamos dejando algo….
Esta situación nos ha obligado a ver que lo tienes ahí, y ver que a tu lado hay serie gente que son hasta simpáticos y te caen bien, que son gente agradable (ríe abiertamente), y que a lo mejor no conocías tanto… has convivido más, y eso es una cosa que algunos han destacado también.
«Yo no recordaba haber visto una serie en casa por la noche», «chico, qué van a pensar de mí mis hijos cuando me conozcan de verdad, y debo hacerlo bien porque me siguen saludando», decía alguno… (ríe).
Mucha gente ha visto esa opción de estar en casa, y eso es muy importante.
Por último, he visto sobre todo inquietud en lo que vaya a ocurrir y mucha desconfianza en el Gobierno en nuestros invitados. Herce
ASR: ¿Lo primero que harás -o has hecho ya- cuando esto se acabe?
JIH: Lo primero que de he hecho es salir a trabajar… (ríe) y luego, claro, salir a tomar algo con los amigos, pero la primera salida me dio miedo lo que estaba viendo. Vi una auténtica irresponsabilidad en parte de la gente, amontonándose en terrazas, en parques, no sé si con una falta de conciencia propiciada por esa mala información.
Echo de menos esas comidas con amigos, la tertulias… pero aún esperare un poco hasta que esto no se aclare y seamos más responsables todos.
Entonces, ¿qué es lo primero que he hecho?, pues salir a trabajar (carcajada).
ASR: ¿Cómo saldremos de esta? Herce
JIH: Pues saldremos tocados, anímicamente porque esto ha sido muy duro, y ha sido muy duro por la gente que ha padecido la enfermedad, por la gente que lo ha padecido por la cercanía, por la gente que no ha podido despedirse de sus seres queridos, por ese confinamiento tantos días encerrados… de ahí vamos a salir algo tocados aunque confío en que esa memoria de pez, a la que antes aludía, funcione y el español eso lo olvide y tiré hacia adelante, con las debidas precauciones, por supuesto, porque el español cuando tiene que echarse para adelante… se echa, somos así.
Hay una cosa clara, para tirar para adelante tienes que tener alguien que te ayude, en vez de frenarte, y ahí es donde está el problema, este Gobierno es el que tiene que poner los medios para canalizar esa fuerza que da la unión para que vaya hacia adelante, no que la rompa porque entonces vamos mal.
Y por supuesto, vamos a salir muy, muy tocados en el aspecto económico, la crisis va a ser muy fuerte, muchos parados, va a haber muchos problemas, y ahí tenemos que estar todos unidos y todos unidos saldremos hacia adelante, más tarde o más temprano, pero saldremos, aunque va a depender mucho de las políticas que se marquen, y nos dejaremos, como dicen nuestros amigos, pelos en la gatera, pero saldremos, cómo no.
«Todos unidos saldremos hacia adelante, más tarde o más temprano, pero saldremos. Aunque va a depender mucho de las políticas que se marquen»
Ha sido un auténtico placer, y divertidísimo, una hora magnífica, de las que merecen mucho la pena. Tiempo ganado.
José Ignacio Herce Álvarez, es AMIGO, y grande, muy grande, y muy sincero, aunque eso moleste.
Espero que este, su coloquio, haya servido para conocer mejor a una persona muy discreta en cuanto a muchas de las cosas que hace y hace bien.