Sol Andrada-Vanderwilde: «Saldremos de esta reforzados. Reforzados y reforzados». Coloquios de cuarentena con J. I. Herce - Cazawonke

Vídeo mensaje de Sol Andrada-Vanderwilde: «Como esta encina, nosotros vamos a florecer, España es un país grande»

Parece que vamos entrando en la recta final de nuestros ‘Coloquios de cuarentena’, pero nosotros seguiremos al pie del cañón hasta el último día, sobre todo porque para mí es un compromiso y un placer realizarlos. Sol Andrada-Vanderwilde

Este martes vamos a ver las repercusiones y consecuencias de este COVID-19 en las fincas privadas y en las especies protegidas que habitan en ellas.

Para comentarlo, nadie como Sol Andrada-Vanderwilde (SAV), directora de la Fundación Amigos del Águila Imperial Ibérica, Lince Ibérico y Espacios Naturales de Carácter Privado.

JIH: Sol, ¿cómo estáis tú y los tuyos?

SAV: Pues fenomenal, hemos tenido mucha suerte.

No hemos tenido casos graves en la familia más cercana, pero sí algún fallecimiento y enfermos en nuestro entorno desgraciadamente.

La cosa en Madrid ha sido apocalíptica, pero gracias a Dios no nos ha tocado cerca.

JIH: ¿Has sentido o sientes miedo a la enfermedad?

SAV: No. No porque considero que tanto mi familia como yo en principio no somos grupos de riesgo y estamos bastante bien de salud, pero si me preocupan los mayores, mis padres, tíos, amigos…

Pero aun así no he tenido miedo porque no soy una persona temerosa y sí me tengo que morir pues iré al cielo o al infierno y ya está (ríe).

También estoy tranquila porque creo que estamos en buenas manos a nivel sanitario, con gente que se está dejando la piel por nosotros y por eso, te insisto, no tengo miedo.

Quizá también porque vivo fuera de Madrid y eso minimiza la situación. También tengo que reconocer que tengo amigas a las que les ha colapsado sus vidas y eso me da mucha pena.

Eso sí, no dejo de reconocer que es una enfermedad terrible.

«Estoy tranquila porque creo que estamos en buenas manos a nivel sanitario, con gente que se está dejando la piel por nosotros»

JIH: ¿Qué fue lo primero que se te ocurrió cuando anunciaron el confinamiento?

SAV: Yo como no tengo miedo a nada y todo me parece fenomenal, pues no hice acopio de alimentos ni de papel higiénico porque pensé que esto en pleno siglo XXI no llegaría a ser algo tan dramático, es más, lo vi como algo que podía ser hasta positivo porque nos iba a permitir estar a toda la familia junta… pero nunca pensé que fuera a ser tan largo.

«No hice acopio de alimentos ni de papel higiénico porque pensé que esto en pleno siglo XXI no llegaría a ser algo tan dramático»

JIH: ¿Cómo afrontas estos días de cuarentena?

SAV: Pues mira, yo fenomenal.

Casi no ha cambiado mi ritmo de vida porque tengo la oficina en mi casa con lo cual yo sigo con mi rutina habitual a nivel trabajo y familiar, pero lo que sí me ha cambiado radical es mi actividad deportiva.

Yo soy muy deportista y prácticamente todos los días jugaba, entrenaba o incluso competía al tenis o al pádel y eso se me ha cortado de raíz…

«Durante la cuarentena no ha cambiado mi ritmo de vida porque tengo la oficina en mi casa con lo cual yo sigo con mi rutina habitual a nivel trabajo y familiar»

JIH: Algún cántico habrás echado, ¿no?

SAV: Lo dices porque sabes que canto en un coro de góspel (ríe)… Pues sí, pero on line, cada una desde su casa coordinadas por la directora, también he tenido la suerte de participar en una versión de ‘La muerte no es el final’ en un homenaje que hicimos el pasado domingo y que podéis ver en YouTube.

JIH: ¿Te ha dado por la cocina como a buena parte de la población española?

SAV: Nooo, detesto la cocina (ríe), cocino solo para alimentar a mi familia y a mí, pero si puedo delegar prefiero hacer cualquier otra cosa… lo cual es una ventaja porque a los que les ha dado por ahí se han echado cuatro o cinco kilitos encima (ríe).

Sol Andrada-Vanderwilde: «Lo que más echo en falta en esta cuarentena es no tener a mis padres cerca, pero bueno, hablamos mucho, hacemos muchos zooms…».

JIH: ¿Qué es lo que más echas de menos durante esta cuarentena?

SAV: Sin duda, el deporte al aire libre, jugar, ver a mis compañeras… esa terapia de grupo como la llamo yo. Y, por supuesto, la desazón de no tener a mis padres cerca, pero bueno, hablamos mucho, hacemos muchos zooms… y, claro, echo de menos irme algún fin de semana al campo y disfrutar de esta primavera.

JIH: ¿Crees que esta crisis cambiará nuestro modo de vida?

SAV: Sí, yo creo que va a cambiar mucho la manera de relacionarnos, en el sentido de que nos vamos a tocar menos, besarnos menos… pero eso no va a evitar que nos relacionemos porque eso va unido a nuestro carácter mediterráneo y seguiremos reuniéndonos y haciendo grandes festejos no me cabe la menor duda. La copa de vino, la Feria de Sevilla… y muchas de tus tertulias camperas (ríe).

«Sí, yo creo que esta crisis va a cambiar mucho la manera de relacionarnos, en el sentido de que nos vamos a tocar menos, besarnos menos… pero eso no va a evitar que nos relacionemos»

JIH: ¿Cómo crees que afectará a nuestro rural en general esta pandemia?

SAV: Aquí hay dos cosas importantes que destacar, una que se está aplaudiendo mucho a los sanitarios, transportistas, a la policía… pero también hay que aplaudir a todo el sector rural que ha seguido trabajando en el campo para tener los mercados abastecidos y nos han permitido mantener una calidad de vida excelente, y quiero pensar que gracias a esto la gente haya puesto su mirada en el mundo rural y su importancia para nuestra vida diaria.

Y, por otro lado, que todo eso lo han hecho con muchas más limitaciones que los habitantes de una ciudad, ellos no han pasado una cuarentena, han seguido trabajando y con muchos menos medios.

Aunque te reconozco que una vez que pase esto, por desgracia su situación no va a cambiar.

«También hay que aplaudir a todo el sector rural que ha seguido trabajando en el campo para tener los mercados abastecidos»

JIH: ¿Cómo os afectará a los propietarios de fincas esta situación? Sol

SAV: Lo primero que tengo que hacer es lamentar el fallecimiento de al menos dos miembros de nuestra Fundación, y luego dar a conocer la situación de algunos propietarios que no tenían su residencia en las fincas y han tenido que hacer un esfuerzo máximo para mantener la gestión de ellas, que todos sabemos que tiene que ser diaria y no entiende de pandemias y cosas así.

Algunos han viajado a sus fincas con las escrituras de las mismas para demostrar que también tenían una emergencia que atender y evitar catástrofes mayores.

JIH: ¿Esto hará que la gente vuelva a pensar en el campo como residencia habitual?

SAV: Estoy absolutamente convencida de ello, y te lo puedo confirmar porque amigas mías que trabajan en el sector inmobiliario me cuentan que hay mucho movimiento de gente interesándose por casas en el entorno rural, alejadas de Madrid… porque se han dado cuenta que después de esto lo que les gustaría es vivir en un entorno más sano, más libre y esto seguro que va a beneficiar al campo y sobre todo a la España vaciada.

JIH: ¿Desde la Fundación, cómo veis que esta situación está afectando a las especies protegidas existentes en vuestras fincas, tipo águila imperial o lince?

SAV: Afortunadamente va bien, piensa que las especies para subsistir necesitan alimento, refugio y tranquilidad y en este caso, la tranquilidad sobra (ríe), el refugio también sin problema y es en el alimento donde te decía que muchos propietarios de su propio bolsillo se ocupan de que a estas especies no les falte el alimento, fundamentalmente el conejo para especies como el águila imperial o el lince.

Las Administraciones no cubren estas necesidades al menos a un nivel importante, y si estos propietarios se van a ver afectados por las consecuencias económicas de esta crisis, evidentemente eso repercutirá en que no podrán destinar los mismos recursos al mantenimiento de estas especies como antes.

Por eso espero que las Administraciones, cuando esto se estabilice, dediquen partidas para ayudarnos a poder proseguir con nuestra labor en las condiciones adecuadas para el mantenimiento de estas especies.

«Espero que las Administraciones, cuando esto se estabilice, dediquen partidas para ayudarnos a poder proseguir con nuestra labor en las condiciones adecuadas»

JIH: ¿Desde la Fundación habéis preparado algún plan de actuaciones al respecto?

SAV: Nosotros tenemos previsto solicitar unos fondos, como hacemos periódicamente, para la mejora del hábitat del águila imperial y el lince ibérico.

Cuando lo conseguimos, que no es siempre, lo que hacemos es repercutir lo percibido entre las zonas especialmente sensibles para el mantenimiento de estas especies.

Normalmente se utiliza para la construcción y mantenimiento de vivares, repoblaciones de conejos, ayudas a las siembras, mantenimiento de puntos de agua… siempre dirigidas a mantener las poblaciones de conejo como base para que estas especies puedan sacar adelante sus crías.

Pero esto es una línea de trabajo habitual en nuestra Fundación, no ahora como algo excepcional.

Vamos a hacer una encuesta a nuestros socios para tomar el pulso a la situación global de cada una de ellas aprovechando que todas tienen diferentes tipos de explotaciones. A este respecto estamos llevando a cabo un estudio que nos interesa mucho, que es conocer cómo la propiedad privada contribuye a través del CO2 que retira de la atmósfera mediante su gestión agrícola, cinegética… al cambio climático.

Así igual que un encinar limpia la atmósfera, pues también la limpia un sembrado, por ejemplo, y como te digo, aprovecharemos esta encuentra para saber cómo ha afectado a cada una de ellas esta situación en la explotación a la que se dedique.

«Estamos llevando a cabo un estudio que es conocer cómo la propiedad privada contribuye a través del CO2 que retira de la atmósfera mediante su gestión agrícola, cinegética… al cambio climático»

JIH: ¿Qué pides al Gobierno que haga cuando esto termine en relación con las fincas privadas?

SAV: Pues mira, para las fincas privadas y para todo, que dialogue con los afectados.

Estos señores giran sobre su eje, no se relacionan con nadie, tienen que hablar con las diferentes CCAA, ya que cada una tiene sus necesidades en los diferentes sectores agrícola, cinegético, pero ya sabemos que cierto sector de este Gobierno no es favorable a la propiedad privada…

«Pido a este Gobierno, para las fincas privadas y para todo, que dialogue con los afectados»

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Sol Andrada-Vanderwilde: «Todas las tardes hago batas en casa junto a varias vecinas y ya llevamos muchos cientos… Las hacemos con bolsas de basura y las están utilizando en muchos hospitales de Madrid».

JIH: Quiero que también nos cuentes algo de esa labor social que estas llevado a cabo desde tu casa

SAV: Pues sí, es verdad, yo todas las tardes hago batas en casa junto a varias vecinas y ya llevamos muchos cientos… Las hacemos con bolsas de basura y las están utilizando en muchos hospitales de Madrid.

Ahora nos estamos dedicando sobre todo a llevarlas a las residencias de ancianos.

Y me parece importante que lo recalques, no por mí, sino porque no entiendo cómo la Administración ha sido capaz de dejar sin material adecuado al personal sanitario que ha estado y está en primera línea en la lucha contra la enfermedad.

A mí me hace mucha ilusión que nos envíen fotos de médicos, enfermeras, limpiadoras, con nuestras batas, y piensa que todavía, a día de hoy, seguimos haciendo cuarenta o cincuenta por día… en fin, algo impensable que estemos así en el siglo XXI.

«No entiendo cómo la Administración ha sido capaz de dejar sin material adecuado al personal sanitario que ha estado y está en primera línea en la lucha contra la enfermedad»

JIH: ¿Qué es lo primero que harás cuando esto acabe? Sol

SAV: Estoy ya con la falda de tenis puesta (ríe). Estamos todas las amigas del club esperando el momento de echarnos a las pistas y volver a jugar otra vez.

JIH: ¿Cómo saldremos de esta?

SAV: Reforzados. Reforzados y reforzados, no me cabe la menor duda.

No soy nada pesimista, aunque hay gente que lo está pasando y lo pasará muy mal, tenemos los medios para ayudarlos y vamos a ayudarles a todos, que para eso estamos en el siglo XXI y en un país civilizado.

Esto solo es un paso atrás para coger impulso…

«Saldremos de esta reforzados. Reforzados y reforzados, no me cabe la menor duda. Esto solo es un paso atrás para coger impulso…»

Charlar con Sol siempre es un placer, es una mujer polifacética, deportista, canta en un coro de góspel… y sobre todo derrocha vitalidad, optimismo y pase lo que pase ella siempre tira para adelante.

Contertulia habitual en nuestras ‘Tertulias camperas‘, sus opiniones siempre aportan la vitalidad que a veces nos falta a los demás… en fin, seguro que este coloquio no os habrá defraudado.

Coloquios de cuarentena